Es bien sabido que la exrepresentante y exformula vicepresidencial de Gustavo Petro, Ángela María Robledo, renunció al movimiento Colombia Humana y hoy, milita de nuevo en su antiguo partido, la Alianza Verde.
El problema no radica allí, sino en los tira y aflojes mediáticos de parte y parte. “De tiempo atrás yo venía sintiendo una incomodidad al interior de Colombia Humana más que personal, política, muy involucrada en prácticas de exclusión frente a decisiones que se venían tomando en términos de reuniones a las cuales no fui invitada”, afirmó Robledo.
Las alianzas de los Robledos
Por si fuera poco, en octubre de 2020 el senador Jorge Enrique Robledo se salió del Polo Democrático y lanzó su movimiento político denominado Dignidad, esto generó enfrentamientos entre los dos senadores, que desataron fuertes señalamientos de Petro contra Robledo al afirmar que “ojalá le vaya bien en su nueva deriva en la historia del país”, mientras que el exsenador del Polo dijo que “(Petro) obraba como el señalador y eso no estaba bien”.
Lo cierto es que, al parecer Jorge Enrique Robledo se fue del Polo debido al sector de ese partido que presiona el apoyo a Petro, y hoy hace parte de lo que las izquierdas, junto con Ángela María Robledo están llamando la Coalición de la Esperanza.
Dicho grupo de políticos también incluye a Juan Fernando Cristo, Sergio Fajardo, Humberto de la Calle, Juan Manuel Galán y Sandino. Este grupo tiene el respaldo del Partido Verde y mas puntualmente de Angélica Lozano, lo que asegura el apoyo de la actual alcaldesa Claudia López, que de seguro empuja la visibilidad mediática de esta alianza.
Esta coalición anunció este lunes que el próximo 7 de abril presentara su propuesta, afirmo El Espectador.
La coalición petrista: el pacto histórico
Mientras tanto, es imperativo saber que Petro tiene alianza con la Unión Patriótica (partido fundado hace décadas por las FARC), por supuesto su movimiento la “Colombia Humana”, los sectores del Polo Democrático antes mencionados, y aquí es fundamental hablar de su cercanía con el régimen cubano, que viene operando de manera desbordada en el país y por supuesto, su ADN “bolivariano”, que lo hace el más cercano de la izquierda al régimen venezolano.
Este aquelarre de izquierdas también fue presentado el 11 de febrero con Margarita Rosa de Francisco a la cabeza y autodenominándose Coalición de Pacto Histórico.
¿Y entonces qué es lo que está pasando?
Lo que en realidad está operando en Colombia es el dispositivo comunista-leninista de mostrarse como divididos, por qué no decirlo, enfrentados, lo cual no solo genera una falsa confianza de la derecha, sino que visibiliza mediáticamente y permanentemente a las izquierdas.
Curioso es el caso de que los dos bloques hayan lanzado sus plataformas “con amplio despliegue de recursos informáticos y periodísticos el jueves 11, el primero con la foto de sus principales figuras, congregados presencialmente y luciendo tapabocas, como registro del momento en que reciben a Ángela María, el segundo con bien diseñada rueda de prensa, coordinada por el periodista afrodescendiente Otoniel Umaña y abierta por la actriz y columnista Margarita Rosa de Francisco, quien leyó el manifiesto del Pacto Histórico”.
En Bogotá no han funcionado de ninguna manera los gobiernos de la izquierda, mucho menos el desgobierno de Petro, pero este tipo de estrategias que se aprovechan del ciudadano incauto, los ha llevado a tomarse el poder de varias de las ciudades más importantes del país, y por supuesto, la capital, y ahora, pretenden fagocitarse al país entero.
Y mientras tanto en otros sectores políticos
Existe en Colombia en la actualidad un gravísimo problema con otros espectros políticos que aunque, de cara a unas elecciones, podrían mostrarse como la antítesis del senador comunista, como Federico Gutiérrez que, aunque afirma que Gustavo Petro no es lo que Colombia necesita, de igual manera, ha optado por definirse como de “centro”, y el gran problema del centro es que por ahí, entra la izquierda.