“Es poco probable que Moscú esté dispuesto a participar en una operación militar con todas las de la ley para defender al presidente Maduro”; así lo afirmó un experto ruso a Mundo Sputnik News, un medio operado por la agencia Rossiya Segodnya de la Federación de Rusia.
Se trata del politólogo ruso y profesor de la Universidad Estatal de San Petersburgo, Víktor Jéifets, quien aseguró que en caso de una presunta intervención militar por parte de Estados Unidos, los soldados de la Fuerza Armada de Venezuela no podrán con los estadounidenses.
“En caso de que haya una invasión militar a gran escala, no creo que el Ejército venezolano pueda con el estadounidense. Pero sí podrá infligir un daño considerable en el mar. Ello podría ser suficiente para que los estadounidenses renuncien a una invasión militar por esta ruta”, resaltó Jéifets.
El especialista aclaró que la llegada de militares rusos a Venezuela no representan ninguna amenaza, pues solo se trata de funcionarios y especialistas técnicos que apoyan al país suramericano en el mantenimiento de equipamiento ruso.
“Los que se envían a Venezuela no son los soldados de las Fuerzas Armadas de Rusia, sino especialistas de perfil técnico. Es una diferencia importante porque no se planea que esta gente participe en combates y efectivamente se trata de una renovación de personal planificada”, señaló.
El especialista agregó que mientras Venezuela “recibe unos sistemas de defensa antiaérea completamente funcionales, por si surge la necesidad de emplearlos”, Rusia demuestra su presencia geopolítica ante Estados Unidos.
“Definitivamente no pensamos involucrarnos en una carrera armamentística con EE.UU., pero así demostramos que no solo ellos pueden estar en nuestro patio trasero: nosotros también podemos hacerlo”, enfatizó.
Aclaró que Rusia no está abriendo una base militar en Venezuela pero que puede utilizar los puertos del país suramericano.
“No estamos abriendo una base militar en Venezuela, pero tenemos la oportunidad de usar sus puertos y podemos llevar a cabo maniobras militares conjuntas muy cerca de EE.UU. Por lo cual, la importancia de Venezuela para Moscú radica en este ámbito”, informó.
Las declaraciones del experto ruso coinciden con las que ofreció Craig Faller, jefe de operaciones del Comando Sur de Estados Unidos, quien señaló que el interés de Rusia en la región es precisamente afianzar su presencia para ir contra los intereses del Gobierno norteamericano.
“Están ahí. Están presentes y trabajan por sus intereses nacionales de una manera que es 100 % contraria a la estabilidad a largo plazo en la región”, dijo Faller.
Rusia, el salvavidas de Maduro
La tiranía de Venezuela estaría usando a Rusia como un salvavidas en todos los ámbitos, mientras el Gobierno de Putin afianza su presencia en la región retando constantemente al de Estados Unidos.
A Putin no le conviene, bajo ninguna circunstancia, que Maduro abandone el poder, sobre todo luego de recibir gran parte de las riquezas venezolanas, pues con la economía del país suramericano devastada por más de seis años de recesión, el Gobierno de Maduro ha recurrido cada vez más a Rusia en busca del dinero y el crédito que necesita para sobrevivir, ofreciendo a cambio preciados activos petroleros estatales.
En junio se conoció que el régimen chavista le regaló dos nuevos yacimientos de gas a Rusia, otorgándole el 100 % del proyecto y todos los derechos del gas explotado.
La petrolera rusa ya participa como socio minoritario en varios proyectos conjuntos de producción de petróleo en Venezuela, como Petrovictoria, Petromonagas y Petromiranda, en la faja petrolífera del Orinoco, así como Boquerón y Petroperijá, en el estado Zulia. Además, en marzo, Maduro decidió trasladar la oficina de Petróleos de Venezuela de Lisboa a Moscú para reforzar la asociación estratégica entre ambos países.
Analistas internacionales aseguran que Rusia sigue respaldando a Maduro no solo para aumentar su presencia en América Latina e incomodar a Estados Unidos, sino también porque Venezuela le ha otorgado millonarias concesiones en materia financiera.
La petrolera rusa Rosneft ha canalizado más de 17 000 millones de dólares en préstamos al régimen chavista durante la última década. Lo anterior mientras que la empresa europea ganó tres millones de toneladas de petróleo en 2017 de sus operaciones en Venezuela. En general, Rusia ha invertido en muchas industrias venezolanas, desde banca hasta ensamblaje de autobuses. Al mismo tiempo, entre los países latinoamericanos Venezuela ha sido uno de los mayores compradores de armas rusas.