Como si huyeran de un país en guerra, los venezolanos arriesgan sus vidas para salir del país a través de trochas, ríos y métodos irregulares, luego de que Nicolás Maduro cerrara las fronteras.
La Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) advirtió que aunque no hay paso desde Venezuela para Colombia y Brasil, el éxodo no se frena y cada día se hace más peligroso.
Los venezolanos cruzan el río Táchira bajo el riesgo de morir ahogados, otros pagan a “coyotes” para ingresar a Colombia a través de caminos clandestinos e ilegales; todo esto, porque Maduro cerró la frontera e impide la salida de los ciudadanos que huyen de la crisis.
Venezolanos “navegando” por el Río Táchira para llegar a Colombia. Con el cierre de la frontera por parte del régimen, se le niega a los venezolanos la comida y medicina que iban a buscar a Cúcuta y expone a una población inocente a la extorsión de grupos armados en las trochas. pic.twitter.com/ELK6XlKnwV
— David Smolansky (@dsmolansky) April 2, 2019
“La gente desesperada por cruzar encuentra la forma de hacerlo, y desafortunadamente es a menudo presa de redes de traficantes, contrabandistas o grupos armados”, destacó Andrej Mahecic, el portavoz de Acnur.
A medida que la crisis en Venezuela se recrudece, aumenta la emigración venezolana. De acuerdo con las cifras oficiales, al menos 5.000 personas cruzan la frontera diariamente huyendo de la emergencia humanitaria.
El pasado martes 2 de abril se registraron fuertes tensiones en el Puente Internacional Simón, cuando unas 46.000 personas desesperadas intentaron cruzarlo en ambas direcciones.
Ante esta situación, el gobierno de Colombia anunció que implementará puntos móviles migratorios para tratar de mantener un control, en medio de la desorganización e ilegalidad que representan las trochas, tras el cierre de frontera por parte de Maduro.
“Buscamos generar puestos móviles migratorios (…) que nos podamos ir moviendo de un punto a otro para poder controlar esa población que está ingresando por sitios no autorizados”, dijo el director de Migración Colombia, Christian Krüger.
En la frontera hay unas 60 trochas ubicadas a lo largo de la frontera, por las que a diario transitan miles de venezolanos.
“Para mí es triste, nunca pensé verme en esto”: conmovedor relato de Tamara, una abuela venezolana que tuvo que cruzar el rio Táchira con su nieta en brazos https://t.co/BXPS3y0hKi pic.twitter.com/JG66u7Wd8a
— Noticias RCN (@NoticiasRCN) April 4, 2019
Y es que, a medida que empeora la crisis en Venezuela y tras el anuncio de Estados Unidos de que a corto plazo no habrá una intervención militar, miles de ciudadanos manifestaron su deseo de emigrar en busca de un futuro mejor.
Amigos y enemigos, es hora de salir de Venezuela.
— Jóse R Guzmán (@JoseRGuzman) April 3, 2019
Pero al mismo tiempo en que aumenta la crisis migratoria que afecta principalmente a los países de la región, también aumentan los casos de vulnerabilidad; sobre todo en los niños.
El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia emitió un informe en el que calcula que 1,1 millones de niños necesitarán protección y acceso a servicios básicos en 2019 en América Latina y el Caribe debido a la crisis migratoria en Venezuela.
Según los cálculos de la organización, 4,9 millones de personas en toda la región requerirán de ayuda especial este año a causa de las condiciones políticas y económicas en Venezuela; una situación que provoca que los países de tránsito y acogida estén sufran una sobrecarga migratoria que dificulta la prestación de servicios como protección, atención sanitaria y educación.
Hay que recordar que según Acnur y la Organización Internacional para las Migraciones, unos 3,4 millones de venezolanos han salido del país a causa de la crisis política y económica.
Colombia es el principal país de acogida, con 1,1 millones de inmigrantes y refugiados, seguido de Perú, Chile, Ecuador, Argentina y Brasi.