El gobierno de Estados Unidos “dio en el clavo” y sancionó a un primer grupo de culpables de la ruina de Venezuela. Se trata de personas y empresas que desfalcaron al país con la ayuda de los regímenes de Hugo Chávez y Nicolás Maduro.
La Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro de Estados Unidos (OFAC) atinó un duro golpe contra quienes hicieron fortuna a costa del dinero de Venezuela. Según el Departamento del Tesoro, el monto total del esquema de corrupción fue de 2.400 millones de dólares.
Treasury Targets Venezuela Currency Exchange Network Scheme Generating Billions of Dollars for Corrupt Regime Insidershttps://t.co/ncZTaUWoCG pic.twitter.com/rvURM8xp18
— Treasury Department (@USTreasury) January 8, 2019
Puede calificarse que este escándalo es el caso de corrupción más grande en la historia de la región, y supera con creces al de Lava Jato, pues la constructora Odebrecht reconoció haber pagado sobornos por USD $788 millones, mientras que en el caso de Venezuela, uno de los implicados en el desfalco del Estado reconoció haber recibido USD $1.000 millones en pagos por realizar actividades ilegales. Esto evidenciaría que el desfalco al país suramericano podría representar un importante porcentaje del PIB venezolano.
Las nuevas sanciones financieras son contra Raúl Gorrín y su esposa, propietarios de Globovisión y acusados de lavado de dinero; así como contra Claudia Díaz Guillén, extesorera nacional, quien libra una batalla legal para no ser extraditada a Venezuela desde España.
Asímismo, las sanciones incluyeron a Adrián Velásquez, esposo de Díaz Guillén; Leonardo González, miembro de la misma trama de corrupción, Gustavo Perdomo, cuñado y socio de Gorrín; y contra su esposa, Mayela Tarascio.
Según la OFAC, estas siete personas formaron parte de la delación de Alejandro Andrade, el extesorero nacional venezolano que se encuentra en calidad de testigo protegido en EEUU, a través de un esquema de corrupción que les entregaba dólares preferenciales y luego los vendían en el mercado paralelo.
“Personas con acceso al régimen venezolano han robado miles de millones de dólares de Venezuela, mientras los venezolanos sufren. El Departamento del Tesoro está apuntando a esta red de corrupción cambiaria”, señaló el secretario del Tesoro de EEUU, Steven Mnuchin, en el comunicado.
Hay que recordar que este grupo de sancionados es conocido como la “banda de los enanos”que estaría encabezada por Nicolás Maduro, pero que además salpica al Poder Judicial, empresarios y a la misma Fuerza Armada de ese país.
Luis Velásquez Alvaray, un exmagistrado chavista del Tribunal Supremo de Justicia venezolano reveló recientemente que la plataforma delictiva que destruye al país involucra a los empresarios Raúl Gorrín y Gustavo Perdomo, dueños de la cadena televisiva Globovisión, quienes presuntamente estarían vinculados al narcotráfico junto con el actual presidente del Tribunal Supremo de Justicia, Maikel Moreno.
Según el exmagistrado, de la “banda de los enanos” se deriva el saqueo a la estatal petrolera PDVSA, el cartel de los Soles, vinculado al narcotrático, y la creación de los chavistas colectivos armados.
“Esta camorra gubernamental siempre la ha coordinado Nicolás Maduro; primero desde la Asamblea Nacional, después desde el ministerio de Relaciones Exteriores y ahora desde Miraflores (…). Chávez conocía todo el andamiaje y ordenaba los envíos a Cuba para necesidades apremiantes de la isla”, agregó Velásquez Alvaray.
Y es que según el Departamento del Tesoro, Gorrín y González, “controlaban la riqueza corrupta que se generaba a través de Andrade, poniendo el dinero en cuentas en el exterior y reinvirtiéndolo en propiedades, aviones y otros activos de lujo, según las indicaciones de Andrade. Su porción de las ganancias ilícitas nunca se le envió directamente (…) la compra de estos activos se hizo a través de una red sofisticada de compañías estadounidenses y extranjeras. Todos los individuos envueltos en el esquema gastaron sus porciones de las ganancias en Estados Unidos, y mantenían cuentas significativas en bancos de EEUU”.
De multimillonarios a reos
Algunos de los empresarios venezolanos cómplices del desfalco de Venezuela, hacedores de la crisis humanitaria que enfrenta el país suramericano, están en manos de la justicia internacional.
Hombres que, de la noche a la mañana, se convirtieron en multimillonarios, con propiedades de lujo repartidas por diferentes ciudades, aviones, yates y “medio mundo” a sus pies, pasaron a ser reos y prófugos de la justicia, tras haber lavado miles de millones de dólares del Estado venezolano con la ayuda del chavismo.
El exguardaespaldas de Chávez y Gorrín
El más reciente y escandaloso caso es el de Alejandro Andrade Cedeño, exguardaespaldas del presidente exfuncionario Hugo Chávez, y que posteriormente fue nombrado como tesorero de la nación.
Tras dejar su cargo como tesorero, se mudó al sur de la Florida (EEUU), donde compró una lujosa hacienda de caballos en el área de Wellington, conocida internacionalmente por sus actividades hípicas.
Fue Andrade el que admitió ante la justicia estadounidense haber recibido USD $1.000 millones en comisiones de sobornos.
El extesorero se declaró culpable por lavado de dinero y ahora enfrenta a la justicia estadounidense. A la que le ha revelado decenas de nombres que estarían implicados en la ruina del país suramericano.
En sus delaciones, Andrade mencionó a Raúl Gorrín, dueño del canal de noticias Globovisión, quien le habría pagado hasta USD $1.000 millones en comisiones, además de gastos relacionados con aviones privados, yates, casas, caballos, relojes y ropa de diseñadores, por hacer transacciones a una tasa de cambio favorable.
Si la comisión de Andrade fue por esta suma, hay que imaginarse cuál fue la multimillonaria ganancia de Gorrín, quien habría fungido como intermediario para las transacciones ilícitas.
De acuerdo con el Departamento de Justicia de Estados Unidos, la acusación formal alega que Gorrín pagó esa cantidad de dinero en sobornos a dos funcionarios venezolanos de alto nivel, incluido Andrade, para garantizar los derechos a realizar transacciones de cambio de moneda extranjera a tasas favorables para el Gobierno venezolano.
El banquero del chavismo
Otro involucrado en el caso, y que hoy se encuentra detenido, es Gabriel Arturo Jiménez Aray, banquero venezolano que también se declaró culpable ante fiscales federales en Estados Unidos.
Jiménez fue propietario del Banco Peravia, con sede en la República Dominicana, y habría sido cómplice de las transacciones ilícitas. Admitió que se asoció con Gorrín y otras personas para adquirir la entidad bancaria con el objetivo de lavar más fácilmente el dinero de los sobornos.
Jiménez fue vicepresidente del Banco Peravia, en República Dominicana hasta el año 2014, cuando sus directivos fueron acusados de fraude por la Fiscalía del Distrito Nacional de República Dominicana. El Banco Peravia fue intervenido por la Superintendencia de Bancos de ese país por presuntas estafas, enriquecimiento ilícito y lavado de dinero. Jiménez huyó entonces de República Dominicana hacia Estados Unidos.
La exenfermera de Chávez
Otra involucrada en ayudar en el desfalco de Venezuela es Claudia Díaz, exenfermera del fallecido expresidente Hugo Chávez, y quien también estuvo al frente de la Oficina Nacional del Tesoro (ONT).
Díaz y su esposo, el capitán Adrián Velásquez Figueroa, recibieron unos USD $65 millones de la cuenta personal de Gorrín en el HSBC Private Bank (Suiza) y desde las cuentas de las empresas registradas en Panamá.
Según las investigaciones realizadas hasta ahora, Díaz acumuló una gigantesca fortuna durante su paso por la Tesorería Nacional de Venezuela y el Fondo de Desarrollo (Fonden), entre el 2011 y el 2013.
Se trata de miembros de la llamada “boliburguesía” venezolana, una élite que ha amasado fortunas durante la revolución bolivariana que inició Chávez y que están bajo intensa investigación de los fiscales estadounidenses.
Desde hace más de una década en Venezuela se aplican rígidos controles de cambio que han alentado la corrupción al permitir que unos pocos privilegiados le compren divisas al Gobierno al tipo de cambio oficial y las revendan en el mercado negro obteniendo de manera instantánea enormes beneficios.
Más boliburgueses que saquearon Venezuela
El pasado 25 de julio, la justicia de Estados Unidos logró desmantelar una banda de criminales millonarios que lavaron dinero y saquearon la estatal PDVSA; mientras, la “Justicia” del país suramericano no investiga lo que pudo haber sido el robo más grande en la historia de Venezuela.
La demanda señala que la operación de malversación de fondos comenzó en diciembre de 2014, cuyo plan era lavar alrededor de USD $600 millones de la petrolera estatal venezolana, dinero obtenido “a través de sobornos y fraude”. En mayo de 2015, los fondos malversados se duplicaron a USD $1.200 millones.
La Fiscalía indicó que este esquema de corrupción fue respaldado por corredores, bancos y firmas de inversión inmobiliaria en Estados Unidos y otros países.
La red de exfuncionarios chavistas lavó USD $1.200 millones de PDVSA en Florida (EEUU), y estarían involucrados no solo ciudadanos venezolanos, sino también de otras nacionalidades.
Las autoridades indicaron que hasta el momento fueron detenidos dos empresarios: Matthias Krull, de 44 años, ciudadano alemán y residente panameño, y el colombiano Gustavo Adolfo Hernández Frieri, de 45 años. Ambos fueron arrestados en julio de 2018 en Miami (EE UU) y en Sicilia (Italia), respectivamente.
Los acusados, que obtenían el dinero gracias a la distorsión cambiaria de Venezuela y al acceso a los fondos de la estatal PDVSA, utilizaban, principalmente, como estrategia la compra de propiedades inmobiliarias en Miami, además de “esquemas sofisticados de inversiones falsas”.