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La exfiscal general de Venezuela, Luisa Ortega Díaz, cuenta con al menos 56 archivos que demuestran la corrupción chavista en el país suramericano; entre las denuncias se encuentra la vinculación de una empresa vasca y millones de euros que implicarían al expresidente de España, José Luis Rodríguez Zapatero.
Luisa Ortega cuenta con documentos que señalan a una empresa vasca con el nombre Rabazven Holding, la compañía estaría dirigida por los venezolanos Juan Rafael Carvallo López y Pedro Enrique Malavé Benavides.
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Dicha corporación habría recibido comisiones de 38 millones de euros (USD $45.136.001,9) en una operación de venta de ocho buques militares de la empresa pública Navantia que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, a través de su Ministerio de Defensa, entonces en manos de José Bono, llevó a cabo con la Administración de Hugo Chávez en 2005.
De acuerdo con las investigaciones de la exfiscal, dirigentes del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) y altos cargos militares venezolanos se repartieron la comisión.
Según La Tribuna del País Vasco, el expediente sobre el caso está en manos de la CIA y la Interpol con el título: “caso sobreprecio en construcción de buques para la Armada en España, Evert García Plaza, Alto mando militar”.
Al parecer el acuerdo firmado entre los dos gobiernos incluía la construcción de cuatro Buques de Vigilancia Litoral con un costo total de 508,68 millones de euros, así como de cuatro Patrulleros Oceánicos para la Vigilancia de la Zona Económica Exclusiva, con un precio de 698,71 millones de euros.
El monto total de la operación fue de 1.207,39 millones de euros. Pero en los documentos finales de la operación el precio aumentó, ya que el Gobierno venezolano habría pagado 1.246 millones de euros, 38.600.000 de euros más.
Este sobrecosto se debe a que en las fases finales de la operación de venta, y según la información de la que dispone la fiscal Luisa Ortega Díaz, se dio cabida a una gran empresa dedicada a la consultoría internacional, que habría de embolsarse el 3,5% del total del dinero del contrato.
Se trataba de la compañía Rebazve Holding S.L., que está inscrita en el Registro Mercantil de Vizcaya, y que está dirigida por dos venezolanos, Juan Rafael Carvallo López y Pedro Enrique Malavé Benavides.
Juan Rafael Carvallo López es uno de los grandes empresarios “boliviarianos” de la época de Hugo Chávez, mientras que Pedro Enrique Malavé, el otro administrador de Rebazve Holding S.L., también es responsable de otra empresa española: Fashion Canary Islands.
Hasta el momento, ni el exministro español José Bono, ni José Luis Rodríguez Zapatero, que fueron los hacedores directos de la venta han ofrecido explicación al respecto.
Fuente: La Tribuna del País Vasco
