Nicolás Maduro otorgó al vicepresidente de Venezuela, Tareck El Aissami, nuevos y amplios poderes a través de decretos presidenciales, lo que ha impulsado la especulación sobre posibles planes de sucesión.
De acuerdo con el portal internacional Bloomberg, El Aissami cuenta con la potestad tanto de determinar gastos ministeriales como de expropiar empresas privadas en cuanto así lo considere.
Del mismo modo, El Aissami, de origen sirio, y recientemente nombrado en el cargo de vicepresidente, está autorizado para emitir órdenes económicas que afectan desde impuestos, hasta asignaciones de moneda extranjera para empresas estatales.
Dicha información fue publicada en la Gaceta Oficial del pasado 26 de enero pero distribuida este lunes 30 del mismo mes.
Los nuevos poderes superan a los que históricamente se ha otorgado a los vicepresidentes en Venezuela y pudieran compararse con las obligaciones del mandatario nacional.
De acuerdo con el abogado constitucionalista, José Vicente Haro, el último decreto emitido por un jefe de Estado se hizo cuando Hugo Chávez se retiró del ojo público para recibir tratamiento durante la última etapa de su lucha contra el cáncer.
“En términos de presupuestos, cualquier ministro o funcionario ahora tendrá que pedir el permiso de Tareck”, dijo Haro. “Sin duda, ahora es el segundo más poderoso del país”.
Cabe destacar que la oposición venezolana ha luchado “contra viento y marea” para lograr un referendo que revoque de la presidencia a Nicolás Maduro; sin embargo, la Corte Suprema de Justicia y el Consejo Electoral de Venezuela pausaron el proceso de manera indefinida para prevenir efectivamente una nueva elección presidencial.
Un referendo revocatorio que este año revoque a Maduro llevaría a que El Aissami asuma la Presidencia por el resto del mandato.
Cabe destacar que el actual vicepresidente fue señalado por fiscales de Estados Unidos como uno de los principales interlocutores de Chávez con el Hezbolá y le atribuyen la entrega de pasaportes venezolanos a activistas de esa organización.
El Centro para una Sociedad Libre Segura con sede en Washington publicó en 2014 un trabajo titulado: “Canadá en guardia: Evaluando la amenaza de Irán, Venezuela y Cuba a la seguridad inmigratoria”; allí los autores aseguran que Venezuela emitió al menos 173 pasaportes venezolanos a islamistas radicales que buscaban entrar a Norteamérica.
Los autores de este informe, Victoria Henderson, directora general del Instituto de Canadá de Análisis Social y Económico (ISEA); Fernando Menéndez, investigador del Centro para una Sociedad Libre Segura (SFS, por sus siglas en inglés) y Joseph Humire; director del SFS, vinculan al actual gobernador del estado Aragua, Tareck El Aissami quien estuvo al frente del Ministerio de Interior entre 2008 y 2012, y presuntamente habría creado una red de lavado de dinero para encubrir el financiamiento a grupos extremistas del Medio Oriente. Además aseguran que durante años, El Aissami ha estado ingresando terroristas iraníes a Venezuela.
Fuente: Bloomberg