Se encienden las alarmas en Cancún (México) tras el tiroteo Playa del Carmen, pues luego del trágico evento surgieron desde mensajes del grupo criminal Los Zetas hasta un ataque en la Fiscalía de esa ciudad.
Medios locales reportaron este martes 17 de enero que un grupo de al menos 10 sujetos armados atacó un centro de videovigilancia en Cancún y las instalaciones de la Fiscalía General de Quintana Roo. Los ataques dejaron un saldo de tres personas muertas, entre ellos dos policías y un presunto agresor.
“Tuvimos el reporte de disparos de arma de fuego contra la Fiscalía a las 16:00 horas (local). Los policías estatales y municipales que estaban en las instalaciones hicieron frente a la situación y se activó el código rojo”, declaró Rodolfo Del Ángel Campos, secretario de Seguridad Pública de Quintana Roo.
Aunque se desconocen los detalles del hecho se presume que el ataque podría haber sido perpetrado contra el fiscal de Quintana Roo, Miguel Ángel Pech, encargado de la investigación sobre el tiroteo registrado en la discoteca Blue Parrot, en Playa del Carmen.
Tras el incidente en la Fiscalía y el centro de monitoreo, se desplegó un dispositivo de seguridad en el que participa el Ejército mexicano para dar con los agresores.
A pesar de que el fiscal Pech explicó que el tiroteo de la discoteca se originó por un intercambio de disparos, el periodista Héctor de Mauleón insinuó en su columna publicada en El Universal este martes 17 de enero, que la banda los Zetas pudiera estar detrás de todos estos ataques.
Aseveración que la misma banda respalda, puesto que en narcomantas revelaron que se atribuyen el ataque en la discoteca.
La mañana de este martes 17 de enero fueron halladas al menos cuatro narcomantas en la que Los Zetas se atribuyen el ataque en el que resultaron cinco personas muertas, entre ellas tres extranjeros, y otras 15 heridas.
“Los Zetas nunca se fueron” de Cancún
En modo de crónica Mauleón expuso los diferentes casos de violencia en los que la banda ha estado involucrada en dicha entidad desde 2010 y asegura: “Los Zetas nunca se fueron de Quintana Roo […] sus células siguen actuando en Cancún, Playa del Carmen y Mahahual”.
Puede ser que un simple conflicto entre dos personas haya provocado la balacera de Blue Parrot, pero en todos los casos, los ataques ocurridos en bares del estado se han dado por las mismas razones: venta de protección, “derecho de piso”, ajuste de cuentas y narcomenudeo.
De este modo concluye la columna del periodista mexicano que invita a las autoridades de ese país a prestar atención en la violencia desatada en Quintana Roo.
Fuentes: El Universal; Univisión; Proceso