EnglishEste jueves 25 de junio de 2015 pasará a la historia del Ecuador con una de las protestas ciudadanas más grandes que se hayan registrado en la ciudad de Guayaquil. A partir de las 14h00 locales, alrededor de 400.000 personas —una de cada cinco habitantes de la ciudad— coparon la avenida 9 de Octubre y sus alrededores, con el fin de expresar su malestar con las últimas medidas tomadas por el Gobierno del presidente Rafael Correa. De esta manera, se cumplen casi tres semanas consecutivas de manifestaciones en contra del primer mandatario.
La protesta, convocada el pasado 12 de junio por el alcalde de la ciudad portuaria, Jaime Nebot Saadi, reunió a ciudadanos de todas las edades y clases sociales bajo el lema “#GuayaquilProtesta“. Así mismo, varios grupos de otros cantones de la costa ecuatoriana, tales como Vinces, El Empalme y Samborondón, llegaron a la ciudad para unirse a la multitud, vestida con los colores celeste y blanco, propios de la bandera de Guayaquil.
Alrededor de las 17h00, y luego de atravesar con dificultad la marea de personas en el evento, Nebot subió a una tarima levantada en el Malecón 2000, desde donde habló cerca de 45 minutos hacia los guayaquileños presentes. “Estas cosas hay que vivirlas para contarlas. Esta multitud ordenada, pacífica, pero rebelde y contundente, es Guayaquil, que hoy representa a la patria ecuatoriana”, fueron las palabras con las que el burgomaestre inició su intervención.
Si bien Nebot expuso en días anteriores que esta no era una protesta en contra de Correa, sino contra “el sistema totalitario” que el primer mandatario “busca imponer”, la multitud coreó en reiteradas ocasiones el “Fuera Correa, fuera” que se ha venido escuchando en todas las manifestaciones llevadas a cabo en los últimos días en el país.
Por su parte, el Gobierno ecuatoriano anunció que no llamaría a sus seguidores a las calles, puesto que “jamás pondría a sus militantes en peligro”. No obstante, las instituciones gubernamentales ubicadas en el lugar de la concentración hoy amanecieron decoradas especialmente para la ocasión. Del edificio del Banco Central del Ecuador colgaba una pancarta con la imagen del Papa Francisco, que llegará próximamente al país, con una de sus frases en contra de la acumulación de la riqueza.
En la parte superior del mismo edificio también hubo parlantes que transmitían mensajes a favor del Gobierno, y a los que se les subió el volumen durante la intervención de Nebot. Asimismo, del edificio del Banco del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (BIESS) colgaba un cartel en el que se acusaba a Nebot de no proveer servicios básicos a los sectores más pobres de la ciudad. Ante esto, el alcalde respondió que “pese a todos los esfuerzos del correísmo por evitar que la gente saliera a protestar, ninguno le funcionó”.
“Este hombre [Correa] no es demócrata. Los demócratas no hacen ese tipo de cosas … se saben empleados del pueblo, no dueños del pueblo como cree este señor que es”, aseguró el alcalde. “Él cree que le puede ver la cara de tonto al pueblo.… Su credibilidad va en picada, más rápida y más letalmente que el avión de German Wings. Lo que pasa es que no va a matar a los ecuatorianos con él, que se estrelle solo”, continuó Nebot, en medio de gritos y aplausos de los presentes.
Minutos después, el alcalde de Guayaquil convirtió la calle en una especie de asamblea popular, haciendo una serie de preguntas a los asistentes acerca de las medidas que el Gobierno busca implementar en relación con las herencias y la plusvalía.
“Dicen que la ganancia en los bienes legítimamente adquiridos es ílegitima, que es del Estado. Dicen que las herencias son ilegítimas, salvo cuando ellos, los pipones, son los herederos; ahí sí todo es legítimo. Ese país no lo vamos a aceptar nunca, porque ese no es Ecuador, esa es Venezuela, donde este señor dice que se ha reducido la pobreza,” sostuvo Nebot.
“¿Ustedes quieren que Ecuador sea Venezuela? ¿Ustedes quieren el país que nos propone Correa? ¿Ustedes quieren que se sume el impuesto a la herencia? ¿Ustedes quieren que se sume el impuesto a la plusvalía?”, continuó. Cada una de estas preguntas fue respondida con un “No” ensordecedor por parte de los asistentes.
Mas adelante, Nebot calificó la política económica del Gobierno como una “triste realidad” que se basa en el “bolsiqueo” (un localismo para robo), y que sale de ese “laboratorio de proyectos fracasados que se llama Senplades“, cuyos líderes”quieren ganar el premio Nobel de Química, transformando en estiércol un país que tiene futuro”. Adicionalmente, alertó a los ciudadanos que el Gobierno busca poner en peligro la dolarización, y que hay que ponerle fin a este modelo de Gobierno, “pero en las urnas, democráticamente”.
Finalmente, el alcalde Nebot aseguró que el Gobierno de Correa ha buscado crear división entre los ecuatorianos, pero que la ciudadanía le está poniendo un alto, porque queremos un Ecuador “libre, justo, solidario y unido”. “Aquí estamos para decirle a este hombre ándate al carajo con tu propuesta divisionista; el país de Correa se acabó”.
Ciudadanos en otras ciudades del país también se unieron a la protesta de este jueves contra el Gobierno. En Quito, los manifestantes se juntaron en horas de la tarde en la avenida de Los Shyris, donde el alcalde Mauricio Rodas también se manifestó públicamente en contra de los nuevos impuestos que promueve el primer mandatario.
Actualizado el 26 de junio de 2015 a las 9:45 a.m.