Joe Biden está comprado y pagado por China, declaró Donald Trump, y señaló que el hoy presidente no advirtió en campaña que haría todo que hoy está haciendo, como cerrar el oleoducto de Keystone, con lo que se pierden millones de dólares y miles de trabajos, y otras acciones que están destruyendo a Estados Unidos.
Ni siquiera pienso que se trate de Biden, sino del “Cabal”, comentó Trump. Lo que está haciendo Biden es más radical que incluso lo que haría Bernie Sanders, quien nunca soñó en que se aprobaran cosas que se están aprobando, dijo el ex presidente Trump. “Es una desgracia”.
Durante una larga entrevista con Lisa Boothe, colaboradora de Fox News, quien estrenó su propio programa, “The Truth”, en podcast, este lunes 22 de marzo, el líder de MAGA aborda el desastre causado por la migración centroamericana alentada por el gobierno, y la crisis que está causando, y habla del COVID-19 y las vacunas, y de sus altos niveles de popularidad.
Lisa Boothe recordó el speech de Trump en la convención RNC, cuando el expresidente criticó que Biden por 47 años se la pasó abrazando y besando a los trabajadores de los sindicatos, tomando sus donaciones, regresando a Washington DC y mandando los trabajos de regreso a China.
Porque eso es esencialmente lo que está pasando ahora: cerró la línea de Keystone, suspendió la construcción del muro, la gasolina sube de costo. ¿Está comprado y pagado Biden por China?, pregunta Boothe. “Sí”, responde Trump. Y más que eso.
Trump lamentó que la gente invirtió mucho dinero en estar cerca del oleoducto de KeyStone. Abrieron negocios. Hoteles. Y en un día todo se había ido. Eso no lo dijo Biden en la campaña. Los precios de gasolina se están yendo al cielo.
Y además, resulta absurdo cerrar Keystone y sustituir el transporte de hidrocarburos por trenes y camiones. El oleoducto es más seguro. Cuando se usan trenes y camiones, si hay un accidente, habrá una devastación, valoró Trump.
Tampoco dijo Biden que subirían los impuestos. “Es un récord”, criticó el neoyorkino.
Lo que queda claro es que Trump está metido al 100 % preparando todo, como líder indiscutible del Partido Republicano, para ganar las elecciones del próximo año y con ello pavimentar su regreso a la presidencia. “Tengo un 97 % de aprobación”, apuntó.
Justo ayer Jason Miller, uno de sus asesores, anunció que en dos meses aproximadamente estaría lista una nueva plataforma de red social, propia, y hoy lunes 22 Trump concede su primera entrevista luego de su aparición pública en el CPAC el pasado 28 de febrero.
Fox News ha sido clave en cada una de las más recientes jugadas de Trump: realizó la mejor cobertura del CPAC de Orlando, entrevistó a Jason Miller donde se anunció la creación de una nueva red social, y ahora una de sus analistas, Lisa Boothe, entrevista en exclusiva a Trump.
Sin duda el proyecto MAGA puede contar con este gran aliado estratégico y poderoso, Fox News, donde no se pueden dejar de lado los fuertes análisis cotidianos en los espacios de Tucker Carlson, Laura Ingraham y Sean Hannity.
Por todo esto, lo que se dijo en algún momento sobre el rompimiento de Robert Murdoch con MAGA, fue falso. Fox y Trump van caminando con una misma visión patriótica de Estados Unidos.
En la entrevista con Boothe, Trump criticó fuerte la actuación de Biden y los demócratas ante la crisis de los migrantes en la frontera. Advirtió que se iba a acentuar en los siguientes meses.
Llama la atención que no dejó de señalar la buena relación y aprecio que dice tener por el presidente mexicano, pero tampoco deja de señalar que amagó en algún momento con imponer aranceles a productos mexicanos si no se contenía la migración ilegal de Centroamérica.
Tiene razón Trump cuando evalúa que de América Latina llega a Estados Unidos mucha gente buena, de lo mejor, pero por desgracia, en las caravanas de migrantes, también puede ir infiltrada gente negativa, por lo que debe tenerse cuidado.
Criticó Trump que Biden hoy quiere llevarse las palmas por un trabajo que no hizo sobre las vacunas. Reconoció que al inicio hubo ciertos contratiempos pero que la recuperación fue mucho más rápida que en otros lados, como en Europa, donde sufren una crisis por el COVID-19. Alabó el trabajo de los gobernadores de Texas y de Florida, ambos republicanos.
En cuanto al futuro del Partido Republicano, dijo Trump que está apoyando a gente muy buena de esas filas. También habló bien del trabajo que ha hecho Ted Cruz y Rand Paul. El liderazgo del GOP dependerá en mucho de las acciones que emprenda Trump en los siguientes meses.
Trump distinguió un tema muy profundo: que hay mucho coraje en Estados Unidos. Sobre todo porque la elección “fue una desgracia”, y la Suprema Corte debería estar avergonzada de su actuación.
Ese coraje debe ser encauzado únicamente por la vía electoral, y nunca por la vía de manifestaciones violentas. El propio Trump ha reiterado que quien cometa un acto violento, será desconocido como parte del movimiento MAGA.
Las emociones son el verdadero motor de todas las elecciones, por ello se necesita cautela e inteligencia, para poder canalizar toda esa energía en votos.
También hizo referencia a la falta de fuerza en el liderazgo de Mitch McConnell, aludiendo a que el GOP necesita un liderazgo más fuerte que él. Habría que apostarle, pensamos nosotros, a Ted Cruz, un colmilludo político que ha flotado en la galaxia Bush, pero que ahora luce fuerte en MAGA.
Cuando Lisa Boothe le pregunta a POTUS 45 si para las presidenciales de 2024 no fuera Trump el candidato, entonces quién iría, el expresidente responde que tal vez irían algunos de los republicanos que acaba de mencionar. Pero no hay que olvidar que, como él mismo señaló, cuenta con un nivel de aprobación del 97%, por sus políticas. Nadie podría superarlo.
Otro tema muy importante que se abordó es la ausencia de libertad de prensa.
Tiene razón Trump cuando lamenta que en Estados Unidos no hay prensa libre. Pone de ejemplo la escasa cobertura del main stream media sobre la crisis de migrantes en la frontera sur. “Muy pocos lo cubren”, dice. “Y eso va a destruir a nuestro país”.
Ya no somos un país libre y no hay libertad de prensa. “El Big Tech se ha vuelto loco”. De ahí se desprende que él abrirá su propia red social, en la que habrá millones de seguidores de forma instantánea, podemos prever desde ahora. El conservadurismo en el mundo necesita espacios, porque ha sido el más censurado y cancelado de todas las tendencias políticas.
Por otro lado, Trump reiteró que el deep state existe, no es un invento, y que está operando y es perverso. Está actuando contra los republicanos, acusó. En parte pensamos hizo referencia a la persecución de varias instituciones de gobierno contra MAGA ante la postura adoptada en relación a las elecciones.
En resumen, es muy preocupante que Biden pudiera estar entregado a intereses extranjeros, a China en especial, doblegado de antemano ante la realidad de que el Dragón Rojo viene con todo y estaría superando a Estados Unidos como la primera potencia económica y militar, en poco tiempo.
Hay muchos que aún hoy no entienden lo que Trump simboliza para los norteamericanos: una opción política patriótica, nacionalista, que lucha por los trabajadores contra el globalismo, contra el entreguismo. Y que representa los valores de la cristiandad, la libertad de expresión y de prensa, la defensa de la familia y la propiedad privada, frente a un progresismo que actúa como virus.