Ejecutivos de las entidades bancarias más importantes de Argentina pronosticaron que el blanqueo de dinero en efectivo tendrá un piso de USD$ 5.000 millones.
Con el blanqueo de capitales, que tendrá vigencia hasta el último día de marzo de 2017, los argentinos podrán incorporar al circuito formal de la economía la tenencia de moneda nacional, extranjera y demás bienes ubicados en el país y en el exterior no declarados.
Con lo que se recaude del blanqueo de capitales el gobierno argentino pretende pagar la deuda que tiene el Estado con los jubilados.
Este lunes 24 de octubre venció la posibilidad de abrir las cuentas especiales para blanquear dinero y el próximo 21 de noviembre, de depositar el dinero en efectivo que no haya sido declarado, en lo que sería la primera etapa del blanqueo de capitales.
El diario Clarín señaló que los ejecutivos de 62 entidades bancarias basan sus cálculos en la apertura de cuentas especiales que se multiplicó en las últimas. En el sistema financiero se habla de 50.000 cuentas abiertas y depósitos ya efectivizados por USD$ 2.000 millones, detalla el diario argentino.
Los ejecutivos refieren que el dinero que se está exteriorizando hasta ahora promedia los USD$ 100.000.
Los bancos, que confían en el éxito del blanqueo, creen que este totalizará cuando menos unos USD$ 60.000 millones. A juicio de los ejecutivos, esta cantidad ayudaría a que Argentina recupere en los ránkings internacionales la categoría de mercado emergente, que perdió en 2009.
Asimismo, se mostraron complacidos con la reducción de la tasa de interés que el país ha logrado. “Por primera vez en su historia, Argentina logró colocar un bono en su propia moneda a diez años a 15,5 % anual”, dijeron ejecutivos citados por Clarín.
De acuerdo a los banqueros otras de las señales de confianza son el crecimiento de los créditos al 30 %, de los depósitos al 36 % y un nivel de morosidad en el piso de 1,8 %.
No obstante, las entidades bancarias advirtieron que el flujo de fondos que provendrá del blanqueo necesita tener instrumentos para invertir en el país, y una menor presión fiscal “para no generar otra vez fuga de capitales y nuevos blanqueos”.
A juicio de los banqueros Argentina requiere una inversión que alcance el 25 % del Producto Interno Bruto (PIB) como mínimo, y que ese es uno de los grandes desafíos en un país que ahorra poco.
Para 2017 los banqueros sitúan en 3,2 % el crecimiento del país, la inflación en 20,1 % y el dólar en $ 18,5 pesos.
“En el exterior premian lo que ya se hizo, desde el fin de cepo, la solución con los holdouts, la recomposición de las estadísticas, el ahorro fiscal por la quita de subsidios a las tarifas, la inflación que está cayendo y una base monetaria que en vez de expandirse al 40 % lo hace al 28 %”, señalaron fuentes citadas por Clarín.
Fuente: Clarín.