El ministro de Energía argentino, Juan Manuel Aranguren, vendió las acciones que poseía en la petrolera Shell luego que la Oficina Anticorrupción (OA) le recomendara hacerlo para evitar un conflicto de intereses.
La venta de las acciones fue por AR$ 16 millones (US$ 1.070.080) y la confirmó este martes el propio presidente argentino Mauricio Macri.
“¿Les doy una primicia? Aranguren vendió las acciones de Shell”, dijo Macri este jueves en la mañana en un breve contacto con la prensa, en el marco del Foro de Inversiones y Negocios.
Antes que se confirmara la venta de las acciones el gobierno había decidido que el ministro Aranguren ya no firmaría medidas que afectaran particularmente a la compañía anglo holandesa durante su gestión.
En el Boletín Oficial que se publicó este martes 13 de septiembre se señala que al ministro se le excusó de “intervenir durante su gestión en todas las actuaciones que estén particularmente relacionadas” con Shell.
El presidente Macri decidió transferir esta función específica al ministro de Producción Francisco Cabrera.
Este lunes 12 de septiembre la Oficina Anticorrupción le recomendó al ministro desprenderse de las acciones o “adoptar alguna medida patrimonial” como la constitución de un fideicomiso ciego de administración y disposición.
La OA basó su recomendación en el “deber de prudencia” previsto en el artículo nueve del Código de Ética de la Función Pública. Según este artículo “el ejercicio de la función pública debe inspirar confianza en la comunidad” y deben “evitarse acciones que pudieran poner en riesgo la finalidad de la función pública, el patrimonio del Estado o la imagen que debe tener la sociedad respecto de sus servidores”.
Asimismo, el organismo anticorrupción señaló al ministro Aranguren que debía abstenerse de tomar intervención en asuntos relacionadas con las sociedades que integran el Grupo Shell “y con relación a la fijación de políticas dirigidas específicamente a dicho grupo empresario”.
“En caso que se presente una situación de este tipo, el Ministro deberá comunicar su excusación al señor presidente a fin de que designe qué funcionario deberá intervenir en su reemplazo”, dijo la OA.
El ministro Aranguren ya había aceptado la recomendación de la OA de no intervenir en las decisiones relacionadas con Shell durante su gestión, pero finalmente decidió vender las acciones que tenía en la compañía.