El Gobierno discutió esta semana con los representantes de las cámaras que nuclean a los supermercados, los precios de productos de primera necesidad en un encentro en el que se percibieron desacuerdos entre las partes, según lo destaca la prensa local.
El ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat Gay, señaló que la reunión se convocó debido a que la inflación estaba bajando menos en los precios de los alimentos. Tres ministros del gabinete de Mauricio Macri participaron del encuentro.
Según el diario Clarín, Prat Gay manifestó su “disgusto” a los representantes de los supermercados por la remarcación de los precios de los comestibles.
“El ministro Alfonso Prat Gay tomó la iniciativa y reseñó el esfuerzo macroeconómico del Gobierno y advirtió que ahora viene el aporte de los privados, en una segunda etapa, para contener la inflación”, narró a Télam uno de los participantes de las negociaciones con los supermercados.
Por su parte el ministro de Producción, Francisco Cabrera, les pidió a los supermercados que “transparenten” los precios, ya que lo que termina pagando el consumidor, incluyendo los descuentos, no es lo mismo que refleja el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec). En este sentido, señaló que esta situación afecta a las cifras de inflación.
“El Gobierno manifestó su preocupación porque con la competencia por las promociones de 3 productos por 2 y otras tantas ofertas semejantes, el cliente pierde noción del verdadero precio del producto”, añadió un portavoz del sector público a la agencia estatal Télam.
A los reclamos se sumó el ministro de Agroindustria, Ricardo Buryaile, quien pidió a las cadenas que mejoren sus plazos de pago en la industria láctea.
Pero las cadenas de supermercados se defendieron señalando que los incrementos no están siendo generados por ellos, sino que les vienen de los principales proveedores.
El gobierno vinculó a los supermercados con los problemas que sufren los tamberos (quienes se dedican al ordeñe, producción y venta de leche) en su cadena de pagos. Esto fue negado por los supermercados que culparon de la situación a las usinas lácteas como Mastellone y Sancor, que son las que manejan la relación con los tamberos.
La situación con el rubro aceite también estuvo presente en la reunión. El Gobierno acordó con la industria y las cadenas para que los incrementos sean paulatinos.
Esta semana el Ministerio de Producción llegó a un acuerdo con la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (Ciara) para que los precios de los aceites tipo mezcla se incrementen hasta 4% en agosto, y un 6% en el caso del girasol.
El inminente aumento en el precio del aceite provocó que la ciudadanía saliera a los supermercados a proveerse de aceite. Ante esta situación algunos supermercados limitaron la venta por persona de este artículo, lo que fue considerado por algunos sectores como una acción ilegal.
La Cámara aceitera señaló que la reacción de los consumidores se debió a las “desafortunadas, imprudentes e irresponsables” declaraciones del dirigente sindical, Daniel Yofra, quien alertó sobre la posibilidad de que se triplicara el precio del producto.
El Gobierno sigue su lucha por bajar la inflación, tema en el cual se ha encargado de crear expectativas señalando que al final de año sería de 25%. Recientemente el ministro Prat Gay tuvo que rectificar la meta diciendo que lo más probable es que se logre para marzo de 2017. Según datos del Indec, la inflación de mayo fue de 4,2% y la de junio quedó en 3,1%.