El gremio periodístico argentino en pleno, diputados de todas las tendencias ideológicas y el propio Gobierno nacional sumaron voces para rechazar de forma unánime el violento ataque cometido este lunes contra el semanario “Tiempo Argentino”.
A las tres de la madrugada del 4 de julio un grupo de choque, liderado por el antiguo dueño del medio, Mariano Martínez Rojas, entró al edificio donde funciona el semanario y las instalaciones de Radio América, causando destrozos en las instalaciones que afectaron inmuebles y equipos. La prensa local señala que los atacantes fueron desalojados por los propios trabajadores del medio y los vecinos del sector.
Un delegado del Tiempo Argentino dijo al diario Clarín que al menos 20 personas atacaron a tres trabajadores que estaban en la sede del medio; rompieron puertas, paredes e incluso causaron daños al servidor central.
Los trabajadores se quejaron de la pasividad de la Policía Federal ante el hecho violento. “La policía llegó hasta el lugar y se quedó en la puerta. Varios compañeros comenzamos a llegar y a pedir que ingresaran, les mostramos los papeles donde consta que el Ministerio nos había designado garantes de las instalaciones, pero el subcomisario nos decía que la fiscalía le había ordenado no ingresar”, explicó a Télam Javier Borelli, presidente de la Cooperativa Por Más Tiempo, que desde abril gestiona la publicación del semanario.
El diario y sus dueños
En diciembre pasado los trabajadores de Tiempo Argentino, uno de los medios del Grupo 23 perteneciente a los empresarios k Matías Garfunkel y Sergio Szpolski, dejaron de percibir sus salarios y la propia patronal bloqueó la impresión del diario.
Télam señala que poco tiempo después se conoció que el empresario Mariano Martínez Rojas había comprado Tiempo Argentino y Radio América.
“Nosotros nunca hemos visto ningún papel que demuestre esa operación. Tampoco nos han pagado los salarios adeudados ni se abonaron las deudas con proveedores que tenía Tiempo. Es más, el propio Martínez Rojas frenó la impresión del diario en su momento”, recordó Gustavo Cirelli, director de la publicación.
Los trabajadores decidieron armar una cooperativa para relanzar el diario como semanario, en vista de que Martínez Rojas no les pagaba sus sueldos y había detenido la salida del periódico.
El diario Clarín detalla que en el caso de Radio América, Martínez Rojas logró tomar por la fuerza su planta transmisora hace tres semanas, en una operación violenta similar a la de Tiempo Argentino. Como este hecho no tuvo consecuencias, decidió hacer lo mismo con el semanario, pero encontró resistencia.
“Yo entré con gente de seguridad y amigos míos, porque soy el dueño de la empresa”, le dijo Martínez Rojas a Clarín. “Yo no rompí nada, ellos lo hicieron cuando entraron con palos y fierros, mientras yo pedía ayuda al 911” agregó.
La fiscal porteña Verónica Andrade citó para este jueves a declaración indagatoria a Martínez Rojas y a 10 personas de su grupo. Todos fueron imputados por los delitos de usurpación y daños en la sede de Tiempo Argentino.
Los trabajadores del semanario decidieron sacar una edición especial este martes 5 de julio para mostrar los daños que ocasionaron los ataques violentos a su sede.
Mañana, en todos los kioscos, edición especial de Tiempo.#TodosSomosTiempo pic.twitter.com/3RX11GPvM7
— Tiempo Argentino (@tiempoarg) July 5, 2016
Rechazo general al ataque
La Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (ADEPA) pidió que se investigara la presunta inacción policial mientras se desarrollaban los hechos. También pidieron que se determine la responsabilidad de los anteriores propietarios, Sergio Szpolski y Matías Garfunkel, así como la de los que figuran como actuales dueños.
El Foro de Periodismo Argentino (FOPEA) repudió “enérgicamente” el violento ataque, mientras que la fundación Libertad de Expresión y Democracia y la ONG Amnistía Internacional dijeron que fue un atentado contra el derecho a la libertad de expresión.
La vicepresidenta argentina, Gabriela Michetti, se sumó al rechazo. “Mi repudio por el ataque a las instalaciones del diario Tiempo Argentino y me solidarizo con todo el personal”, comentó.
En el mismo sentido se expresaron dirigentes del bloque parlamentario peronista Frente Para la Victoria-Partido Justicialista y el bloque aliado al gobierno de Macri, Coalición Cívica ARI. La Central de Trabajadores de Argentina CTA Autónoma y el Partido Obrero, entre otras organizaciones, también repudiaron el ataque.
Algunas agrupaciones de izquierda insisten en “la inacción oficial” del gobierno de Macri. Empleados de Tiempo y Radio América dijeron que los hechos violentos ocurrieron “porque el Gobierno le brinda protección a Szpolski (antiguo dueño) , pese a que fue candidato K a intendente de Tigre en las últimas elecciones”, detalla Clarín.
Periodistas de todos los medios argentinos usaron las redes sociales para expresar su solidaridad a los trabajadores de Tiempo Argentino.