
Las incógnitas que rondan al secuestro y posterior asesinato del exmilitar Ronald Ojeda en Santiago de Chile están cerca de despejarse. Uno de los hechos que puede contribuir a la resolución de este caso es la detención, en las últimas horas, de diez miembros de la banda venezolana Tren de Aragua, a quienes se les vincula a este crimen que ocurrió en febrero de 2024, en la capital austral.
Con un megaoperativo en las comunas de Estación Central, San Miguel y Maipú de la Región Metropolitana, la Policía de Investigaciones (PDI) en conjunto con un comando de Carabineros de Chile ejecutó 21 allanamientos que permitieron ubicar a los sospechosos liderar la facción “Los Piratas”, según informa BioBío
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De acuerdo con el fiscal nacional, Ángel Valencia, los funcionarios policiales allanaron el campamento Vicente Reyes. Allí, en su momento, fue encontrado el cadáver de Ojeda escondido al interior de una maleta, bajo una capa de cemento.
Maduro como pieza clave
Si bien las próximas diligencias son de interés, como la formalización de los detenidos y el inicio de un juicio oral, la teoría sobre la participación del régimen de Nicolás Maduro en el caso de Ojeda sigue vigente. “Sigo sosteniendo que el crimen de Ronald Ojeda es un delito político”, indicó el fiscal a cargo del caso, Héctor Barros.
Además, Barros recalcó que “el perfil de la víctima, un exteniente del ejército venezolano y un activista”, corrobora la hipótesis que existe en torno a este polémico caso.
El alto funcionario cuenta con piezas para armar el expediente, considerando que en noviembre aterrizó en Santiago el venezolano Maickel Villegas Rodríguez, extraditado desde Costa Rica por su presunta participación en la muerte de Ojeda.
Operación internacional
La captura de estos miembros del Tren de Aragua, a quienes se les vincula al caso, es el resultado de una operación internacional. Según el fiscal nacional, Ángel Valencia, las autoridades australes ejecutaron el procedimiento con la cooperación de policías extranjeras.
“Es un golpe importante a una agrupación criminal que cometió decenas de crímenes en nuestro país”, indicó.
El desafío ahora es para la Gendarmería chilena, institución militar armada a cargo de la seguridad penitenciaria, que recibirá a los nuevos reclusos. Las posibilidades de motines en las cárceles rondan al interior del ente desde el ingreso sus líderes, Carlos González, apodado “Estrella”, quien junto a Hernán Landaeta, conocido como “Satanás”; detonaron el peor enfrentamiento en la prisión de máxima seguridad de Santiago.
Ambos están tras las rejas junto a Edward Nava, quien dentro de la célula criminal se hace llamar “Enano”, José Sequera, que está asignado como el jefe de plaza de Ovalle y, también, el jefe de plaza de Chillán, Jorge Boyer.
Gendarmería intenta contener cualquier foco de violencia con diligencias en la cárcel. Al respecto, el director general de la PDI, Eduardo Cerna, reveló que tienen al menos 23 miembros del Tren de Aragua detenidos por ilícitos cometidos en Chile.
Todos arriesgan condenas que incluyen el presidio perpetuo. Hasta ahora, las imputaciones incluyen tráfico de migrantes y drogas, homicidios, secuestros, trata de personas para fines sexuales e internación de armas de fuego. Los juicios orales finalizan en marzo.
Cae “El Turko” en Estados Unidos
Estados Unidos también está detrás de las operaciones del Tren de Aragua en su territorio. Aunque en Chile ninguna autoridad confirma el enlace con Washington para el despliegue del operativo, la captura de una parte de la estructura de la facción de “Los Piratas” en Santiago coincide con el arresto de su líder, apodado “El Turko” por autoridades estadounidenses, en la misma jornada.
“Estuvo en Chile, tiene participación en delitos de manera material, pero cuando huye del país sigue articulando operaciones delictuales y dando instrucciones a esta célula de cómo ejecutar, escapar y planificar operaciones como secuestros”, señaló a Meganoticias el subprefecto de la PDI, Hassel Barrientos.