Afganistán se ha convertido en “un agujero negro en el que mujeres y niñas son masacradas” en una “guerra silenciosa”, y ante la inacción de la comunidad internacional, juristas y sociedad civil españoles piden a España que lleve a los talibanes ante la Corte Penal Internacional (CPI) por “apartheid programado y total de género”.
La presidente de la Fundación Mujeres, Elena Valenciano, denunció en declaraciones a EFE que la situación es “de extrema gravedad y de extrema vergüenza para la comunidad internacional”: “Es peor que un conflicto olvidado, es un conflicto ante el que se ha resignado la comunidad internacional”, explicó.
La cofundadora de la Asociación de Mujeres Juezas de España (AMJE) Glòria Poyatos destacó por su parte que mujeres y niñas apenas tienen derecho para respirar. Olatz Cacho, de Amnistía Internacional, advirtió de la “violación generalizada e institucionalizada de los derechos humanos de las mujeres y las niñas”.
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Este “apartheid programado y total de género”, como lo llamó Valenciano, “no parece un asunto prioritario” en un momento en el que hay “muchos frentes bélicos abiertos”. Ante esa inacción, distintas entidades civiles españolas solicitaron al fiscal de la CPI que abra una investigación, pero es sólo una forma de instarle a que actúe, puesto que sólo los Estados pueden presentar una denuncia formal.
No quieren quedarse ahí y solicitan al Gobierno español que dé un paso al frente y lleve a los talibanes ante la CPI por crímenes de lesa humanidad contra mujeres y niñas, y ya han conseguido miles de firmas.
Desde la organización Más Democracia, Emilia Sánchez señaló que “España está legitimada porque en política exterior siempre ha sido feminista”: “Podemos ser ejemplo y, si nosotros vamos, otros países querrán unirse. Como ciudadanas españolas le pedimos a nuestro país que mueva ficha”.
A su vez, Sánchez lamentó que “a la sociedad siempre le parecen menos sangrantes las vulneraciones de derechos de las mujeres”.
Desde la Fundación Mujeres demandan que el Ejecutivo español, junto a la Unión Europea (UE), los países de la región y la ONU deberían convocar una gran conferencia para ver cómo actuar.
Preguntado por la posibilidad de llevar a los talibanes ante la CPI, el Ministerio español de Exteriores no precisó a EFE si la está considerando.
Poyatos consideró esencial que se denuncie la situación de mujeres y niñas afganas, aunque haya habido precedentes en los que la CPI ha desestimado crímenes con una clara intencionalidad de afectar a las mujeres.
“Para poder abrir camino tenemos que seguir denunciándolo y en algún momento la Corte y la comunidad internacional comprenderán que este tipo de delitos tiene el mismo calado, la misma gravedad que otros tipificados en el Estatuto de Roma. Hay que seguir denunciando hasta que se juzgue con perspectiva de género y se condene”, concluyó Poyatos.
Con información de EFE