Indulto o amnistía. Menos de eso, nada. Así de extrema es la solicitud del presidente izquierdista electo en Chile, Gabriel Boric, quien aboga por alguno de los dos beneficios ante el Senado para los detenidos durante la ola de violencia y criminalidad del estallido de 2019 porque “lo importante es que esa prisión injusta y extendida a la que ha estado sometida tanta gente, pueda terminar”.
Boric espera un “perdonazo”. Ello significa absolver las causas judiciales por homicidio, robo, saqueo, porte de armas, atentado con explosivos e incendios que pesan sobre 144 imputados entre los que se cuentan 12 mujeres.
La Comisión de Constitución del Senado evalúa la sustitutiva presentada por el parlamentario de la Democracia Cristiana, Francisco Huenchumilla, y luego de la revisión lo despachará a Sala para someter a votación el proyecto en las próximas horas.
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Gabriel Boric exhorta a la bancada de derecha a apoyar la tramitación de la iniciativa, pero las probabilidades de respaldo son escasas, considerando que Sebastián Piñera, el actual jefe de Estado, está en desacuerdo con la propuesta porque es “una muy mala señal indultar a personas que han cometido delitos tan graves” y el republicano José Antonio Kast advierte que apoyar esta moción sería promover la “impunidad”.
Mañana se vota perdonazo a los delincuentes del estallido antisocial. Aquí la lista de homicidios, robos, saqueos, incendios y agresiones que algunos califican como “injusticias” y que quieren dejar en total impunidad.
Votar a favor de los vándalos es votar en contra de Chile!🇨🇱 pic.twitter.com/dkYhh9hzTA
— José Antonio Kast Rist 🇨🇱 (@joseantoniokast) January 19, 2022
Un argumento pobre
El presidente electo intercede para “cerrar las heridas” que dejó la revuelta e insta a la búsqueda de alguna “reparación” para las Pymes que sufrieron daños, pero indultar o no a los detenidos durante las manifestaciones de octubre de 2019 será “un complejo dilema” que Boric enfrentará al llegar al palacio de La Moneda.
Todo apunta hacia ese escenario, ya que el proyecto de ley que concede un indulto general no logrará juntar los votos necesarios en el Senado, considerando que el Frente Amplio solo cuenta con una de las 43 curules de la plenaria –el de Juan Ignacio Latorre–, mientras que la coalición de gobierno tiene 19.
Si la votación se fuerza, lo cual empuja Boric con su solicitud, el rechazo por falta de quórum se vuelve viable y abriría una disyuntiva para el presidente electo, quien al asumir el mando el próximo 11 de marzo, tendría que indultar por decreto, lo cual supondría otra complicación porque solo podría hacerlo en el caso de los condenados, lo cual es bastante más impopular.
Presionemos a los senadores para que digan #NoAlIndulto de los delincuentes, piromanos, ladrones y terroristas que cometieron diversos delitos durante el estallido delictual del 18-O!@Senado_Chile#ElVolteretas #FelizMiercoles #ContigoCHV pic.twitter.com/vNkJ84qRYA
— Ángel de la Cruz ✝️🇨🇱 #NoMasTerrorismo (@AngelDLaCruz_) January 19, 2022
Una carga moral
Hay un núcleo duro que todos los días golpea las puertas de la “Moneda chica” –actual sitio de trabajo del presidente electo en la comuna de Providencia– en busca de mediación para sus familiares tras las rejas. No olvidan que Gabriel Boric emergió como líder de la izquierda durante el estallido social de 2019 y que fueron muchos de estos manifestantes quienes lo llevaron al poder.
En octubre del año pasado, la Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento aprobó con votación dividida el referido proyecto de indulto –tres votos a favor y dos en contra– y fue remitido a la Sala del Senado, donde no prosperó.
Ahora, indultar a aquellos que quemaron iglesias lo obligaría a contradecirse con lo que él mismo sostuvo en su campaña, cuando intentó abrazar también la demanda de orden y señaló que no correspondía indultar a quienes hubieran cometido delitos de incendio o agresión.
Este caso es “el principal intríngulis gubernamental” de Boric, según señala un artículo de El Libero, considerando que 62 % de los chilenos rechaza la liberación, mientras que solo 32 % la apoya. El concepto, entonces, de “presos políticos” solo cala entre quienes se identifican con la izquierda, y no todos. Un tercio de quienes comulgan con esta ideología piensa que no hay presos por ideas, sino más bien por la comisión de delitos. Para el instituto español Juan de Mariana, “Chile es el país donde todo está en cuestión”.
"Desde el denominado ‘estallido social’ de 2019 que dio pie a las convulsiones sociales que se prolongaron durante menses, #Chile se enfrenta a su propio destino: es el país donde todo está en cuestión." @MateoRosalesL https://t.co/My1hYrOyEW
— Inst.Juan de Mariana (@juandemariana) January 19, 2022