La salida de la mapuche Elisa Loncón de la presidencia de la Convención Constitucional de Chile y del abogado Jaime Bassa de la vicepresidencia destapó que la izquierda no es un bloque homogéneo dentro de la plenaria y la bancada más débil es la del presidente electo, Gabriel Boric.
El fracaso en las votaciones de Beatriz Sánchez, la candidata de Boric para liderar el órgano hasta el próximo 5 de julio -fecha tope para redactar la Carta Magna- expone la fragilidad política de su coalición Frente Amplio y el posicionamiento del Partido Comunista dentro de la instancia.
Dos días de sesión en 18 horas y nueve vueltas con distintos aspirantes a la cabeza de la Convención sirvieron para que la odontóloga independiente María Elisa Quinteros ganara el puesto, al obtener 78 boletas a favor y dejara a Patricio Mena de la Unión Demócrata Independiente en el segundo lugar con 35 votos, a Sánchez en el tercero con 16 y Roberto Celedón de Apruebo Dignidad y Agustín Squella del Colectivo del Apruebo en el cuarto y quinto lugar con 14 y 11 votos.
Caída aplastante
Además de ser superada por seis veces más de votos, la tendencia dentro de la Convención proyecta una evidente división entre el Frente Amplio y el Partido Comunista considerando que esta tolda respaldó a Quinteros en las urnas.
No fue casualidad. “El Partido Comunista es la más grande duela a quien duela” vocifera su dirigente Daniel Jadue desde que Boric define su gabinete. A ello se añade que la postulación de Sánchez “tomó por sorpresa a algunos sectores de la propia coalición, que pensaban que el Frente Amplio se marginaría de esta elección bajo la lógica de que no era conveniente acaparar tanto poder -La Moneda y la Convención – lo cierto es que finalmente primó la tesis de que no había razón poderosa para restarse de la competencia, atendiendo a la propia autonomía que marcó Boric”, según El Mostrador.
Malas cuentas
Los planes de Boric con Sánchez se cayeron desde el comienzo en la sesión 47 de la Convención Constitucional. Ninguna de las conversaciones con las organizaciones afines a sus intereses fecundó su deseo de tener a la excandidata presidencial del Frente Amplio en la silla principal. De esta forma, se pretendía asegurar una línea de comunicación expedita con su despacho cuando asuma en marzo la banda como primer mandatario del país austral.
“Su nombre desordenó el naipe y puso más presión”, afirma El Mostrador, porque “nadie quería ceder dentro de los distintos colectivos con sus candidatos”.
Para Ex Ante las tensiones que dejó el proceso pintan “las dificultades que tendrá Boric para mantener unida a la coalición -que en la Convención muchas veces ha tomado posiciones opuestas- y reflejó las diferencias internas en torno al rumbo de la asamblea y el calado de las transformaciones que requiere el país”.
Agradecemos a @gabrielboric por su llamado el día de hoy, por el reconocimiento de la autonomía de la Convención y por la voluntad para colaborar con la tarea de la #ConvenciónConstitucional. (1/2) pic.twitter.com/MmlBt7FL3b
— María Elisa Quinteros Cáceres (@MEQChile) January 6, 2022
Boric gana tiempo o lo intenta. Apenas se divulgó el triunfo de Quinteros, la llamó para mostrar su “voluntad para colaborar con la tarea de la #ConvenciónConstitucional” publicó la convencional en su cuenta en Twitter.
Este guiño entre ambos va más allá de un intercambio comunicacional protocolar cuando Quinteros, en las horas que se lleva en el cargo, niega la posibilidad de reunirse con el actual presidente, Sebastián Piñera.
María Elisa Quinteros dice que sería “compleja” una visita de Piñera a la Convención por “las violaciones a los DD.HH. durante el estallido que no han sido del todo reconocidas por el Estado” https://t.co/zMRyHArzF9 vía @latercera
— Rod Naranjo (@rod_naranjo) January 6, 2022
Aprobación en jaque
Lo crucial de este panorama es que “si se necesitaron nueve rondas de votación para alcanzar una mayoría simple todo indica que será difícil redactar la Constitución, ya que cada artículo requiere el apoyo de dos tercios para su aprobación” asegura Hernán Larraín Matte, miembro de centro derecha en la Convención.
El pronóstico no es exagerado cuando para alcanzar el quorum de los 2/3 se necesitan 103 votos de los 155 en juego en el pleno.
Lograr consensos será uno de los mayores retos de Quintero. Ella es ahora la mayor evidencia de la fragmentación del pleno que dirigirá si se recuerda que para elegir a Loncon sólo se necesitaron dos vueltas. Con su arribo, que ameritó jornadas maratónicas, estas parecen que formarán parte de la agenda.
Sin embargo, el reglamento interno establece que una vez cumplidos el próximo 4 de abril, los nueve meses de funcionamiento de la instancia se deberá ratificar a la Mesa vigente. En caso de rechazarse, se elegirá una nueva Mesa. “Es difícil que ocurra pero es una posibilidad” asegura en Twitter el periodista Paul Follet.
🔴UN DATO:
Esta no necesariamente será la última Mesa de la CC.
Según el Rglto, una vez cumplido los 9 meses d funcionamiento (4 de abril), se deberá ratificar a la Mesa vigente.
En caso de rechazarse, se elegirá una nueva Mesa.
Es difícil que ocurra? Sí, pero es una posibilidad pic.twitter.com/2oqORaRng5— Paul Follert (@PaulFollert) January 4, 2022