Venezuela abrió un corredor humanitario para permitir el tránsito de niños y jóvenes que estudian en Colombia, para no interrumpir sus estudios, anunció este jueves el vicepresidente de Venezuela, Jorge Arreaza, en medio de la crisis migratoria en la frontera colombo-venezolana.
“Es importante destacar que los niños que estudian en Colombia están saliendo por el puente de San Antonio del Táchira, en autobuses, en dos horarios en la mañana y en la tarde; 350 niños, que antes salían por las trochas, están asistiendo a clases”, señaló Arreaza en un comunicado de prensa difundido por el Ministerio de Relaciones Exteriores de Venezuela.
“Estamos haciendo las coordinaciones para que puedan ir a estudiar con el acompañamiento de un representante si son muy pequeños”, agregó.
La apertura de un corredor humanitario es una de las tres condiciones que fijó el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, para reunirse con su par venezolano, Nicolás Maduro, y destrabar la conflictiva situación que se vive en la frontera.
“Ya hace muchos días le estamos pidiendo a las autoridades venezolanas que abran un corredor humanitario para que más de 2.000 niños, que los tenemos censados, que están al otro lado de la frontera, puedan asistir al colegio aquí en Colombia. Necesitamos que se abra ese corredor humanitario”, reclamó el mandatario colombiano este jueves.
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Estudiantes colombianos y venezolanos que residen en Venezuela pudieron cruzar hacia territorio colombiano para asistir a clases desde las 6:00 a.m. del viernes a través de los puentes internacionales Simón Bolívar y Francisco de Paula Santander.
Asimismo, el vicepresidente de Venezuela informó que los colombianos que viven en la ciudad fronteriza de Cúcuta pero trabajan en empresas ubicadas del lado venezolano podrán también aprovechar el corredor humanitario.
El 19 de agosto Maduro ordenó el cierre del paso fronterizo en el estado Táchira tras denunciar un ataque de supuestos contrabandistas colombianos que dejaron a dos militares venezolanos heridos.
Desde entonces, Caracas ha deportado a 1.381 colombianos, según la Dirección General de Migraciones de Colombia, y otros 10.000 abandonaron voluntariamente el territorio venezolano frente a la posibilidad de recibir represalias.
Fuente: Reuters.