El pasado lunes, 13 de julio se dio a conocer que el Registro Ciudadano del Tribunal Supremo Electoral (TSE) de Guatemala, rechazó 34 candidaturas a cargos de elección popular, entre ellas la del expresidente Alfonso Portillo (2000-2004), quien se presentaba al cargo de diputado por el partido Todos.
Leopoldo Guerra, Director del Registro de Ciudadanos del TSE, fue quien informó de la decisión y explicó que la misma se tomó porque a el tribunal consideró que el expresidente “carece de idoneidad y honorabilidad” según el artículo 113 constitucional. “Portillo cometió hechos que a simple vista son considerados malos, por lo cual fue extraditado a Estados Unidos y fue condenado por el delito de conspiración para el lavado de dinero, estos hechos afectan gravemente los aspectos de honorabilidad que exige la Constitución para optar a un cargo público”, expuso Guerra.
Además de Portillo, el registro rechazó la inscripción de otros 15 candidatos de dicha agrupación por no presentar los requisitos que exige la ley, entre ellos la del actual diputado Jean Paul Briere.
Evelyn Morataya también vio denegada su inscripción por los mismos motivos. Otros candidatos a quienes se les revocó su inscripción es al alcalde de Barberena Santa Rosa, Rubelio Recinos, quien busca la reelección con el Partido Patriota; y a la alcaldesa de San Benito (Petén), Sonia Lily Rivera, quien aspiraba a la reelección con el Partido Patriota.
Según el artículo 113 de la Constitución guatemalteca, se establece que cualquier ciudadano natural tiene derecho a optar a empleos o cargos públicos. Su otorgamiento depende de los méritos de capacidad, idoneidad y honradez.
El caso de Portillo y los demás rechazados ha sido polémico. Distintos sectores de la sociedad civil venían exigiendo al TSE que no aceptara las candidaturas de personas vinculadas con casos de corrupción.
Fuente: Prensa Libre.