EnglishEste viernes 20 de marzo fue revelado un segundo contrato que involucra nuevamente a Sebastián Dávalos, el hijo de la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, en la participación en negocios que buscaba elevar aún más las ganancias por la reventa de terrenos en el llamado caso Caval.
En el contrato millonario revelado, se daría, mediante una clausula, una cantidad de mas de US$2 millones a Mauricio Valero, socio de Natalia Compagnon, la esposa de Dávalos, en caso de que se llevara a cabo la venta de los terrenos implicados en el caso, al cambiar el uso de suelo de los mismos de rural a urbano.
Este nuevo antecedente salió a la luz pública después de que Hugo Silva, de la empresa Silca, compradora de los terrenos en cuestión, interpusiera una querella por estafa hacia Caval Ltda. En el marco de la investigación, esta querella ya ha llevado a un allanamiento a la casa de la pareja y la incautación de tres cheques por más de $3 millones del millonario negocio.
Sebastián Dávalos y Natalia Compagnon están siendo investigados por las autoridades judiciales chilenas por negociación incompatible y tráfico de influencias al acceder a un crédito de más de $10 millones de parte del empresario, vicepresidente y dueño de Banco de Chile, Andrónico Luksic, para la compra de los terrenos en la ciudad de Machalí, región de O’Higgins, donde se está actualmente modificando el uso de suelo.
El caso le ha costado una pérdida de 18 puntos de aprobación a la presidente, según la última encuesta Cadem, dada la contradicción de su consigna de luchar contra la desigualdad, el lucro y los negocios junto a la política; además, costó la renuncia de su hijo al cargo de director sociocultural de la presidencia de Chile.
Se espera que la investigación en manos del Ministerio Público chileno llegue a su conclusión en los próximos días. Además, que las aristas y nuevos antecedentes sirvan para esclarecer de mejor manera si existió o no tráfico de influencias en la ejecución de este negocio.
Otro préstamo sospechoso
Otro aspecto que se está investigando en el llamado “caso Caval” es un segundo préstamo otorgado por el Banco de Chile a esta empresa de la nuera de Bachelet, cuando la empresa estaba atravesando dificultades financieras, pues le habían cancelado proyectos que ascendían a más de US$800 mil, y sus deudas superaban a sus activos en casi US$300 mil. Este préstamo solo es explicable por los lazos políticos de la nuera y el hijo de la mandataria, afirman medios locales.
Las irregularidades en sus balances han llevado a las autoridades tributarias a revisar las últimas declaraciones de impuestos de la empresa, incluyendo 2013 (el año en que declaró las pérdidas y obtuvo el rescate financiero del Banco de Chile) así como el año pasado, cuando declaró gastos que llevaron su declaración a menos de US$100 mil, cuando sus ingresos habían sido estimados en más de $3 millones.