EnglishEn búsqueda de obtener dólares que permitan transitar con tranquilidad el último año de Gobierno de la presidente argentina Cristina Kirchner, el organismo recaudador de impuestos del país le solicitará a la justicia argentina el historial de los sitios web visitados por los argentinos con cuentas bancarias en Suiza.
La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) busca conocer qué sitios web visitan y qué correos electrónicos envían y reciben los casi 4.000 argentinos bajo sospecha de poseer cuentas bancarias no declaradas ante el fisco argentino en Suiza.
En el Gobierno argentino ya está trabajando un grupo de 20 personas denominado “equipo azul” (en alusión al dólar blue, como es conocida la divisa estadounidense que se obtiene en el mercado negro) dedicado a seguir los pasos de aquellos que posean cuentas en bancos suizos.
De esta manera, los contribuyentes bajo sospecha deberán demostrar que no poseen cuentas en el exterior, en lo que ha sido señalado como una violación a la presunción de inocencia por fuentes confidenciales del diario local El Cronista.
En septiembre, el Gobierno obtuvo a través de la Dirección General de Finanzas Públicas de Francia un listado de 3.900 argentinos incluidos en una filtración de documentación del banco HSBC de Suiza.
Hervé Falciani, un exempleado del banco, le facilitó a la justicia francesa a finales de 2008 un listado con de datos 127.000 presuntos evasores fiscales con cuentas en Suiza. El informático es requerido por la justicia Suiza por el robo de datos bancarios y trabaja actualmente para el fisco francés.
Con esta medida, el Gobierno de Kirchner busca convencer a aquellos con dinero depositado en cuentas en Suiza regularicen esos fondos mediante la compra de bonos, para financiar importaciones de energía y obras de infraestructura, y Certificados de Depósitos de Inversión (CEDIN), utilizados para operaciones inmobiliarias.
En julio de 2013, el Gobierno lanzó un blanqueo de capitales que permite la repatriación de moneda extranjera en condición irregular, aunque su adhesión estuvo por debajo de lo esperado.
Fuente: El Cronista.