English Las fuerzas de seguridad brasileñas mataron a más de 11.000 personas en los últimos cinco años, es decir, a seis ciudadanos por día, según indica el Anuario Brasileño de Seguridad Pública.
El estudio señala que policías brasileños mataron a 11.197 personas entre 2009 y 2013, una cifra similar a la cantidad de muertes en manos de la policía de Estados Unidos durante los últimos 30 años.
“La evidencia empírica de que las policías brasileñas mantienen un patrón abusivo del uso de fuerza letal como respuesta al crimen y a la violencia”, sostiene el informe.
La policía de Rio de Janeiro, donde se celebrarán los Juegos Olímpicos de 2016, continúa siendo la más violenta del país. En 2013, se registraron 416 muertes en manos de la policía, menos de la mitad de las registradas en 2009.
Según el informe, una persona es asesinada en Brasil cada 10 minutos. El estudio da cuenta de 53.646 muertes violentas durante 2013, una reducción del 1,1% respecto del año anterior. Entre las conclusiones se destaca que más de la mitad de las víctimas tenían entre 15 y 25 años, y que un 70% de las que murieron en 2013 eran afrodescendientes.
Bruno Paes Manso, del Centro para el Estudio de la Violencia de la Universidad de San Pablo, indicó a The Telegrapgh que el uso excesivo de la fuerza es “una práctica raramente investigada” y señaló que es frecuente que la policía brasileña ejecutara a los sospechosos.
Además el estudio menciona que 490 agentes de policía murieron en servicio.
Este año la organización de derechos humanos Human Rights Watch llevó a cabo una investigación sobre varios casos de presunta tortura y tratos inhumanos o degradantes a víctimas y presos en San Pablo, Rio de Janeiro, Bahía, Espíritu Santo, y Paraná. La evidencia indicó que más de 150 agentes de policía y guardias de cárceles estuvieron involucrados en violaciones de derechos humanos.
Según la organización, los abusos tuvieron lugar en las calles, en vehículos de policía, en viviendas durante operativos de arresto, y comisarías y centro de detención, entre los que se citan golpizas, amenazas de violencia física y sexual, choques eléctricos, asfixiamiento con bolsas plásticas e incluso violaciones.
La violencia le ha costado al Gobierno de Brasil R$258.000 millones (US$101.097 millones ), el equivalente al 5,4% del PBI del país.
Fuente: El Nacional.