La Oficina contra las Drogas y el Delito de Naciones Unidas (UNODC) alertó a Colombia, Ecuador y Perú sobre la expansión de la minería ilegal como sustitución o complemento a los cultivos ilícitos para la elaboración de sustancias psicotrópicas. “La minería ilegal es un riesgo latente sobre el cual se deben aplicar medidas pertinentes y rápidas para su eliminación” y así evitar daños al medio ambiente, advierte el organismo.
En Colombia, el diario El Tiempo informó que las fotografías satelitales que se emplean para detectar los cultivos de coca han permitido develar que la explotación ilícita de oro y otros minerales está sirviendo como nueva forma de financiación de las guerrillas y las bandas criminales.
La Policía de Carabineros, a cargo de la estrategia contra este delito, dice que en el país la minería ilícita ya no solo afecta a departamentos como Antioquia, Córdoba, Bolívar, Cauca y Chocó, sino que, al igual que los cultivos ilícitos, se ha venido anclando en zonas de frontera con Venezuela, Brasil, Ecuador y Perú.
Un primer diagnóstico hecho por la Unidad Contra la Minería Ilegal, de este cuerpo policial, arroja que solo en la frontera con Venezuela hay 37 municipios con explotación ilícita de yacimientos mineros. El oro, el coltán, el carbón y el níquel son los materiales que más se extraen de esta forma.
El general José Gerardo Acevedo, director de la Policía de Carabineros, asegura que detrás de este tipo de explotación se encuentran las guerrillas de las FARC y el ELN, esta última con mayor incidencia en el negocio. También alerta de la participación de bandas criminales como la del clan Úsuga y lo que queda de los ‘Rastrojos’.
Este año se han intervenido 236 minas, se han capturado 902 sospechosos y se han destruido 39 retroexcavadoras.
La policía advierte que uno de los factores que complica la identificación de las minas es el uso de familias completas como escudos humanos para blindar los campos.
Fuente: El Tiempo.