English Version
EnglishUn apagón eléctrico de más de 48 horas en Barranquilla y Soledad, Colombia, causó protestas y disturbios en ambas ciudades. La muerte del joven Julio Escurriao, de 18 años, fue uno de los lamentables resultados de las manifestaciones. Escurriao recibió un tiro en el abdomen y aún no se conocen los culpables.
Las autoridades informaron que el cierre de avenidas como modo de protesta impidió la atención inmediata de la víctima y facilitó su deceso.
La protesta inició el domingo, cuando la empresa Electricaribe informó tres horarios para la restitución del servicio que posteriormente no se cumplieron. El lunes continuaron las movilizaciones y miembros del Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) respondieron a las mismas con gases lacrimógenos.
Electricaribe sostuvo que el servicio se restablecería la noche del lunes, pero este martes 80 barrios de Barranquilla siguen sin el servicio eléctrico. En la aledaña zona de Soledad, 29 sectores se quedaron también sin agua, pues una estación de bombeo se vio afectada por el apagón.
Elsa Noguera, alcaldesa de Barranquilla, convocó un consejo extraordinario de seguridad para analizar la situación, pues en los desmanes también hubo saqueos, ataques a buses e incluso a una ambulancia de la Red de Urgencia del Caribe. Durante la noche del lunes la red de transporte Transmetro informó que suspendía sus operaciones para resguardar la integridad de sus trabajadores, ya que dos de ellos fueron heridos en un ataque a una estación.
La Defensoría del Pueblo solicitó a la Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios que investigue si hubo negligencia por parte de Electricaribe, ya que se conoce que se reportaron quejas telefónicas de clientes previas al apagón y sin embargo la empresa no pudo contener la pérdida del servicio en 13 circuitos.
Fuente: El Espectador, El Universal, El Tiempo.
