El secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, dijo que el régimen de Nicolás Maduro representa una amenaza para su país. Fue enfático, quizá como nunca lo había sido, en un intercambio de opiniones con el senador republicano Marco Rubio. Ambos subrayaron lo de la amenaza.
“No creo que haya ninguna duda de que el régimen de Nicolás Maduro representa una amenaza para Estados Unidos”, aseveró el secretario de Estado.
El diálogo entre el senador Rubio y Pompeo se dio en el Congreso, durante una audiencia. Fueron varios minutos con mensajes claves. Frases que son torpedos para el régimen de Nicolás Maduro.
Primero, Rubio trató de reseñar el impacto demográfico de la migración venezolana a Colombia y, de alguna forma, su vinculación con el desarrollo de grupos criminales y el aumento del tráfico de cocaína proveniente del país gobernado por Iván Duque.
“Tenemos grupos criminales, carteles, operando de manera impune del lado de Venezuela en la frontera. Reciben el respaldo de oficiales del Gobierno”, dijo el senador, destacando la “honorabilidad” de la mayoría de los migrantes.
Toda esta dinámica, en la que la misma vulnerabilidad de los venezolanos que huyen de su país son candidatos para asociaciones delincuenciales, “desestabiliza la región, Centroamérica y provoca una crisis migratoria”.
Rubio mencionó la reciente inauguración de vuelos entre Teherán y Caracas, por parte de una aerolínea sancionada por Estados Unidos. Además, insistió en la presencia de Rusia en Venezuela.
“Basado en todo esto, ¿el régimen de Maduro representa una amenaza directa a la seguridad nacional y los intereses de Estados Unidos?”, preguntó el senador a Pompeo. El secretario respondió que no duda de ello.
“Mencionaste Irán, Hezbollah está en Sudamérica y el riesgo es muy real; el narcotráfico; y ahora la huella de los rusos. Añade a eso a los cubanos y la protección que le han brindado a Maduro”, aseveró. Luego, Pompeo reiteró: “El régimen de Maduro es una verdadera amenaza a Estados Unidos de América”.
Rubio, posteriormente, dijo algo clave. Habló de que, si bien la crisis venezolana debería despertar el interés del mundo que se preocupa por las violaciones de derechos humanos, particularmente para Estados Unidos se trata de un tema “de seguridad nacional”. “Más allá de eso, esto es lo importante”, aclaró.
“Es algo en lo que coincidimos”, enfatizó el secretario de Estado.
Que un funcionario de tanto nivel y relevancia como Mike Pompeo subraye, en la discusión, lo que significa la permanencia de Nicolás Maduro para Estados Unidos, inmediatamente asoma una ruta y un propósito claro. El secretario reitera que se trata de una amenaza y, con ello, insinúa cuál será la postura del Gobierno de Donald Trump al respecto.
Al esbozar la tragedia venezolana como un peligro latente y directo contra los americanos, el secretario de Estado de Estados Unidos ha condenado al régimen de Nicolás Maduro a su fin.
Las amenazas no se toleran. El amenazado no encubre. Las amenazas se liquidan.