Pese a que entiende bien la crisis venezolana y el impacto que esta tiene en su territorio, el presidente de Colombia, Iván Duque, desestimó la idea de una intervención militar para deponer al régimen de Nicolás Maduro. Al menos fue lo que dijo este lunes 3 de septiembre al medio Caracol Radio.
La pregunta surgió, porque es una discusión importante que se está teniendo, y a propósito de la próxima visita del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a Colombia.
“Creo que los Estados Unidos son los primeros en entender que una intervención militar de carácter unilateral no es el camino”, dijo Duque. Sin embargo, resalta que haya preferido agregar la palabra «unilateral».
“La presión internacional tiene que llevar a que el mismo pueblo venezolano, incluidas sus instituciones —o lo que quedan de ellas— puedan permitir esa transición”, dijo el presidente de Colombia.
El tema de la posibilidad de una intervención militar en Venezuela, por parte de Estados Unidos, se retomó luego de que el senador republicano, Marco Rubio, asegurara que aún persisten “todas las opciones sobre la mesa” para solucionar la tragedia venezolana. Y lo dijo al medio Univisión, justo después de reunirse con el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Bolton.
“Por meses y por años quise que la solución en Venezuela fuera una solución no militar y pacífica. Simplemente que se restaurará la democracia. Hay una Asamblea Nacional electa por el pueblo que se ha nublado a través de esta dictadura”, dijo Rubio.
Luego, espetó: “Yo creo que las Fuerzas Armadas de Estados Unidos solamente se utilizan en caso de amenaza a la seguridad nacional. Creo que hay un argumento, muy fuerte, que se puede hacer en este momento que Venezuela y el régimen de Maduro se ha convertido en una amenaza para la región e incluso para Estados Unidos”.
Esta sarta de palabras encendió, nuevamente, la polémica. Son muchísimos los que entienden que el régimen de Nicolás Maduro no cederá jamás bajo buenas condiciones. Que se aferrará al poder hasta que una fuerza mayor decida lo contrario; y por eso, demasiados abogan por una incursión militar, o de Estados Unidos o de quien quiera salvar a los venezolanos.
Pero Iván Duque disiente. O destaca que esta incursión no puede ser unilateral. Dijo a Caracol Radio: “Las intervenciones militares, sobre todo hoy en el contexto de América Latina, no tienen ningún tipo de respaldo y no debería ser el camino”.
El éxodo masivo de venezolanos ha obligado a la región a despertar y a posar sus miradas sobre un país que dejaron morir por el billete. Esos cientos de miles que arrastran los pies por las fronteras de América, los obliga a actuar.
En consecuencia, Iván Duque ha dicho que hay que responder. Que hay que hacer algo. Porque Colombia, el principal destino o escala de los refugiados, ya no puede más. El presidente dijo hace poco en Europa que la crisis se acabará cuando ya no gobierne la tiranía chavista. ¿Cómo concretar eso? Habrá que esperar y ver qué propuesta surgirá de la reunión que tendrán Donald Trump e Iván Duque en noviembre de este año. El tema principal será, por supuesto, la crisis venezolana.
Ya Marco Rubio dijo que Trump actuará y no dirá a nadie. Y se sabe que el presidente de Estados Unidos, quien en algún momento llegó a estar convencido en que la única forma de resolver la crisis venezolano, era a través de la fuerza bélica, sigue empecinado en sacar de Latinoamérica el problema chavista.