English Version
Este lunes 16 de enero, con un mes de retraso, comenzó a circular el nuevo cono monetario de Venezuela. Los billetes de 500, 5.000 y 20.000 fueron los primeros en aparecer y, al día de hoy, es poco lo que se puede adquirir, incluso con el de mayor denominación.
La imagen de un Bolívar devaluado no ha cambiado. Se mantiene la empobrecida efigie que ha derivado en la ruina de la representación del Libertador de América. Antes era el billete de 100 bolívares el de mayor denominación, con el mismo grabado de Simón Bolívar. Hoy es el de 20.000, con el mismo rostro y, prácticamente, con la misma «fortaleza».
Prometidos para el 15 de diciembre de 2016. Hoy empiezan a verse los nuevos billetes. pic.twitter.com/jC0CWsVBOo
— Rafael Hernández (@sincepto) January 16, 2017
La rampante crisis económica en Venezuela se ha reflejado en una demoledora devaluación e hiperinflación. Los precios de los productos se duplican cada 17 días. Y hoy el nuevo billete de mayor denominación, el de 20 mil bolívares, solo alcanza para comprar, por ejemplo, dos Big Mac en McDonalds.
- Lea más: “Nuevos” billetes de Venezuela impresos en agosto evidencian improvisación de Maduro
- Lea más: Nuevos billetes empiezan a circular en Venezuela pero en cantidad insuficiente
La popular hamburguesa —que en el país suramericano ha recibido el nombre Big Melt por la suspensión del emblema capitalista— cuesta alrededor de 8 mil bolívares (hace dos semanas estaba en seis mil).
Asimismo, solo 6 helados sundae pueden ser adquiridos, por ahora, con el nuevo billete rojo.
No obstante, si el consumidor no está con ánimos de almorzar en la cadena estadounidense, tampoco es mucho lo que puede hacer con el Libertador en algún otro establecimiento.
El costo de un almuerzo promedio en Venezuela ya ronda los 10 mil bolívares. Con el billete de máxima denominación se paga parte de una quincena en el país y, con dos billetes, la pensión de los ancianos.
Un kilo de queso amarillo puede costar, en algunos establecimientos, hasta 17 mil bolívares. En diciembre, por ejemplo, un pan de jamón (popular alimento de Navidad en Venezuela) se encontraba en más de diez mil bolívares y el plato navideño, en doce mil.
En fin, los billetes deben enfrentar, igualmente, la inquisidora crisis económica de Venezuela. Hoy son máximo dos Big Mac lo que se puede adquirir con el de 20 mil bolívares, pero puede que dentro de poco ni siquiera alcance para la emblemática hamburguesa, ni para todos los productos mencionados.
