
Este viernes 25 de noviembre la excandidata por el Partido Verde a las elecciones presidenciales de Estados Unidos, Jill Stein, realizó una solicitud formal para exigir un recuento de los votos en el estado de Wisconsin, como parte de su esfuerzo para contar los votos en tres estados.
Stein comenzó pidiendo fondos a través de crowfunding para lograr el dinero necesario para exigir el recuento de votos y, este jueves 24 de noviembre logró el presupuesto inicial al sobrepasar los US$ 2,5 millones.
Ahora, con el dinero, la candidata realiza la primera solicitud formal en un estado en el que el presidente electo Donald Trump tuvo una victoria bastante ajustada.
Además de Wisconsin, Stein planea exigir recuento en Pensilvania y Michigan, ambos estados en los que ocurrió lo mismo que en Wisconsin: el magnate ganó por una diferencia pequeña.
Aunque la representante del Partido Verde admite que no tiene evidencia que sustente un fraude electoral, asegura que el sistema en esos estados ha sido vulnerado.
Por otra parte, su campaña dijo hoy, según reporta The Guardian, que en la próxima semana llenará la solicitud para los otros dos estados.
Asimismo, además de lo que cuenta la solicitud, la campaña de Jill Stein indica que va a necesitar fondos adicionales para pagar la defensa del recuento. Para la candidata este no es un intento de ayudar a ganar a la excandidata demócrata Hillary Clinton, sino de asegurar “la integridad de las elecciones”.
En Estados Unidos no existe, como en otras naciones, un organismo federal que controle el correcto funcionamiento de las elecciones, por lo que algunos estados deciden, en el caso de elecciones reñidas, si hacer recuento o no. En el caso de los estados en los que esto no sucede, cualquiera de los candidatos puede pedir el recuento y, por ello, pagar una factura sumamente grande.
Fuente: Fox News, The Guardian