Durante una rueda de prensa este lunes 5 de septiembre, el presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, llamó al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, “hijo de puta”, en víspera de una reunión que tendrán en Laos el martes 6 de septiembre con otros líderes mundiales.
“Tenemos que ser respetuosos. No se limite a dudar en todas las cuestiones y luego a hacer comunicados de prensa. Hijo de puta, voy a traerle infelicidad en este foro”, dijo Duterte en la rueda de prensa.
Las palabras del líder filipino son una respuesta a las críticas de Barack Obama y el embajador estadounidense en Filipinas, en contra de su gobierno, además de una advertencia de que no se toquen temas delicados en caso de que se lleguen a reunir ambos dirigentes.
En el pasado, el gobierno de Estados Unidos ha emitido duros comentarios en contra de Duterte por su política de guerra contra las drogas. Asimismo, la Iglesia Católica y varias organizaciones de Derechos Humanos han acusado a Duterte de cometer crímenes de lesa humanidad en la aplicación de sus políticas, que le han quitado la vida a más de 2.400 personas.
Frente a estas acusaciones, el líder de Filipinas prometió este lunes que el “baño de sangre” continuará, hasta que logre el objetivo de erradicar las drogas ilegales en su país.
“Más personas van a ser asesinadas. Vamos a matar a varios hasta que no quede ni un criminal en las calles. Hasta que el último fabricante de drogas esté muerto, no vamos a parar”, dijo Duterte.
“No me importa si a alguien le molesta mi comportamiento”, espetó el presidente de Filipinas.
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Ambos líderes, Obama y Duterte, tenían previsto reunirse este martes en la cumbre organizada por la Asociación de Naciones de Sureste Asiático (ASEAN por sus siglas en inglés) que acogerá a varios mandatarios en Laos.
No obstante, ahora, frente a las polémicas declaraciones del líder filipino, puede que la reunión bilateral entre ambos dirigentes no se dé.
En respuesta a las palabras de Duterte, Obama dijo que pidió a su personal que evaluara si debería reunirse con el presidente de Filipinas.
“Lo que he hecho es pedir a mi equipo que hable con la parte filipina para poder descubrir si se trata de un momento en el que podemos mantener conversaciones constructivas”, dijo Obama.
“[Duterte] es un tipo extravagante. Incluso si llega a haber una reunión, es algo de lo que voy a hablar”, dijo el mandatario estadounidense, haciendo referencia a la controvertida campaña antidrogas emprendida por el presidente de Filipinas.
Fuente: The Telegraph