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Un revelador informe de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos detalla cómo la dictadura de Nicolás Maduro en Venezuela estaría enviando presos liberados para que crucen hacia el país norteamericano con el objetivo de “neutralizar” objetivos. Aunque las investigaciones están en marcha, el asunto cobra sentido teniendo en cuenta la demostrada incursión de criminales, incluyendo la megabanda conocida como el Tren de Aragua.
A los reclusos liberados de las cárceles “se les ha ordenado viajar junto con oficiales de inteligencia para rastrear a exmilitares, políticos y funcionarios venezolanos dentro de Estados Unidos”, advierte el balance de la Unidad de Inteligencia del sector del Valle del Río Grande (SIU, por sus siglas en inglés), al que Breitbart tuvo acceso exclusivo.
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El informe no solo es alarmante, sino que va en consonancia con las reiteradas denuncias del presidente electo Donald Trump sobre criminales venezolanos quienes —usando la crisis migratoria impulsada por la saliente Administración Biden-Harris— logran ingresar por la frontera sur. Su peligrosidad es tal que agentes fronterizos crearon métodos para identificarlos, sin mencionar que se ha detectado su presencia en varios estados, incluyendo el famoso “Mercado de los Enamorados” en el condado de Queens, en Nueva York, relacionado con redes de prostitución.
La “operación de Maduro” contra EEUU
Los agentes fronterizos llegaron a esta conclusión, sobre el envío de criminales autorizado por el chavismo, tras tomar testimonios de sospechosos. También cuentan con información de “una fuente venezolana con detalles sobre la operación de Maduro”. Si bien se trata de un Informe de Inteligencia de Campo (FIR, por sus siglas en inglés) de carácter preliminar, una fuente anónima asevera que no se trata del primer documento.
Entonces, la Operación Aurora anunciada en octubre pasado por Donald Trump durante la campaña presidencial no se trata de una persecución contra todos los migrantes —como lo quiso hacer ver la prensa obediente al Partido Demócrata, incluyendo a Kamala Harris— sino de un plan de acción para abordar las preocupaciones que implica la entrada desmedida de criminales.
Esto provoca preocupación en Miraflores. El régimen chavista cree que venezolanos que han ingresado de forma irregular podrían ser obligados a presentarse de nuevo ante funcionarios fronterizos por las medidas que vaya a tomar la Administración Trump. “El régimen de Maduro puede temer que algunos venezolanos intercambien información para evitar su remoción”, dice esta fuente anónima.
Más de 500.000 venezolanos en EEUU
Hasta septiembre de 2022 se estimaba que habían más de 545.000 venezolanos en calidad de migrantes y refugiados en Estados Unidos, según datos del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR). En el grupo se incluyen exiliados políticos, por ende, la incursión de criminales y funcionarios de inteligencia representa un peligro para quienes vieron en suelo estadounidense un nuevo punto de partida tras la persecución chavista.
Y es que el éxodo venezolano empeoró desde hace dos años protagonizando imágenes de miles de personas cruzando a pie el Tapón del Darién, ubicado entre Colombia y Panamá, y Centroamérica hasta cruzar ilegalmente por la frontera con México. La Administración Biden, con su retórica de recibir y acoger migrantes, sumó otro de varios ingredientes los cuales terminaron dando forma a una crisis incontrolable.
Sin embargo, resta ver qué órdenes activará la próxima Administración Trump y qué otro hallazgos habrá sobre esta operación de Maduro, cuyo complot también podría valerse de funcionarios el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN) para trabajar de la mano de con los reclusos liberados, como lo sugiere el medio estadounidense.
