La primera parte de la saga de Avatar se convirtió en el año 2009 en la película más taquillera de todos los tiempos, posición que aún mantiene. Por ende, las expectativas respecto a la segunda parte también eran altas, sobre todo porque pasaron 13 años entre el estreno de ambas. Y si bien, su propio director James Cameron reconocía hasta hace poco lo difícil que iba a ser estar a la altura de este film, lo cierto es que los números de “Avatar, la forma del agua” no son los que él y Disney esperaban.
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La compañía ha intentado este año instalarse —aún más— en el catálogo de sus fanáticos grandes y chicos para continuar facturando como una de las principales industrias del entretenimiento. Para ello, incluso se apegó a la moda woke estadounidense financiando la promoción de la agenda LGBT en menores de edad. Lo intentó todo. Desde capacitaciones para que su personal se identifique como «no binario» hasta nuevas versiones de películas clásicas enfocadas en “la identidad de género” para ganar simpatías y taquilla. Aún así, las acciones de la empresa han disminuido casi 45 % en lo que va de año, según la firma FactSet.
Avatar 2 está recibiendo reseñas, algunas poco alentadoras, por su duración de más tres horas, así como sus historias inconclusas, aunque con la indiscutible belleza del planeta ficticio Pandora (un trabajo totalmente reconocible en términos de efectos visuales). Según Forbes, “es el rendimiento de la secuela de Avatar lo que ha hecho caer las acciones de Disney en los últimos días”.
Un estreno complicado
En los números no solo incide el desarrollo de la película y las distintas historias que se desprenden de la trama principal. Resulta que la suerte no acompañó al estreno. Tal como reseña Breitbart, el último fin de semana Avatar 2 recaudó 56 millones de dólares, lo que representa una disminución del 58,2 % desde su debut el fin de semana del 17 de diciembre en Estados Unidos.
Por otro lado, la ola de frío que azota a gran parte del país no solo ha dejado 48 muertos de acuerdo con autoridades de ese país, también impide la movilización de personas a cualquier lugar, incluyendo cines. En todo EE. UU., la película de James Cameron ha recaudado solo 279 millones de dólares. La cifra sube a 881 millones de dólares en todo el mundo. Pero solo la producción rondó los 460 millones, sin incluir la publicidad. Entonces, según el portal estadounidense, “Avatar, La forma del agua” tendrá que recaudar “entre 1500 y 2000 millones de dólares solo para alcanzar el punto de equilibrio”.
Volviendo a Forbes, el “decepcionante resultado” de la nueva película de Avatar “ha hecho que las acciones de Disney caigan un 7,93 % en los últimos cinco días”. En consecuencia, dentro del mercado de valores “los precios rinden en relación con las expectativas”.
Los tropiezos de Disney
En el evento conocido como «D23 Expo» Disney anunció en septiembre pasado toda su oferta para el próximo año. Sin embargo, parte del público se pregunta si la empresa seguirá infiltrando la moda progresista. Por suerte Avatar 2 no tuvo tales tintes. Por el contrario, resalta el valor de la familia. Pero ni siquiera ese pequeño viraje le funciona a una compañía marcada por los tropiezos.
Una anterior estrepitosa caída de acciones provocó que en noviembre Bob Chapek, el CEO de The Walt Disney Company, fuera reemplazado. A eso se suman batallas políticas como la del distrito especial en Florida debido a una disputa contra el gobernador Ron DeSantis.
Por supuesto Disney y su conglomerado de medios es enorme y en su caída tendría que influir más que el estreno de una película. Pero algo sí se dejó ver: el año 2022 no fue el mejor.