El rechazo por la elección del izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva como próximo presidente de Brasil es evidente. El estrecho margen con el que superó al actual mandatario, Jair Bolsonaro, demuestra que la mitad del país le adversa. A ese factor hay que sumarle las manifestaciones en las calles, que hoy se mantienen en al menos 10 de los 27 estados que conforman la nación, las cuales iniciaron apenas se dio a conocer el resultado de la jornada electoral. Por lo tanto, todo este contexto se convierte en un abrebocas para lo que será una gestión que ni siquiera ha comenzado.
- Lea también: Lula le pondrá las manos a Petrobras con el fantasma del Lava Jato
- Lea también: China y el Foro de Sao Paulo se enquistan en la región con el retorno de Lula
Ya que no ha habido denuncia oficial de fraude o impugnación, lo siguiente es considerar qué pasará en el futuro político de Brasil con Lula en el poder. Para eso, en PanAm Post entrevistamos a Daniela Alves, estratega en políticas públicas y relaciones internacionales. Desde Brasilia, capital del país sudamericano, asegura que el próximo Congreso de mayoría conservadora debe iniciar un proceso de reorganización. De esta forma, se tendrá como objetivo la creación de estatutos y leyes que eviten medidas como la censura, que en su oportunidad fue ordenada unilateralmente por el Tribunal Superior Electoral y el Supremo Tribunal Federal durante la campaña presidencial, hecho que significó un ventajismo para Lula da Silva.
Ahora bien, también para llegar a este objetivo en algún punto es necesario un liderazgo duro de oposición. Ahí entra el actual presidente. Al respecto, Alves indicó que “Jair Bolsonaro está intentando hablar con las personas para que no hagan protestas con violencia. Creo que él va a canalizar esta indignación nacional contra un gobierno socialista y también para que su liderazgo no acabe siendo infructífero o acabe perdiendo fuerza”.
Para la experta “Bolsonaro tendrá una importancia grande para que las pautas importantes entre su electorado sean consideradas en el Congreso Nacional”. Aglutinar fuerzas será necesario para evitar un avance antidemocrático de instituciones cuando Lula asuma.
Lo que viene para Lula
¿Se podría llevar al próximo presidente de Brasil a un eventual juicio político? Sí. El tema parte de que Lula da Silva no va a quedar solo con integrantes del Partido de los Trabajadores (PT) en su gabinete de gobierno. Cuando hizo campaña formó un frente amplio de varias organizaciones políticas con la promesa de asignar cuotas de poder: “Si Lula no distribuye este poder con su amplia representación partidaria, puede perder apoyo en el primer momento (…) Puede tener una gran posibilidad de un impeachment, si no lograra mantener este frente amplio”. La jugada del próximo presidente socialista de aliarse con otros partidos políticos tendrá un costo muy alto.
A continuación, el análisis de la experta: