Leopoldo López Gil, eurodiputado y padre del opositor Leopoldo López, ya no viajará a Venezuela. Para anunciar la decisión, publicó un video tan solo tres días después de que se diera a conocer su posible postulación para integrar la comitiva que observará las cuestionadas elecciones regionales en el país caribeño.
“No podemos asistir a unas elecciones en un país con tantos presos políticos, con acusaciones ante la Corte Penal Internacional y sin libertad de expresión”, dijo en nombre del Partido Popular (PP), de centroderecha, sobre la decisión “trascendental” de retirar su participación.
El fin de semana trascendió que el diputado europeo iba a estar en la misión que se desplegará en Venezuela del 18 al 23 de noviembre. De inmediato llovieron las críticas por el contraste respecto a la opinión de su hijo, residenciado en España. “Existe el riesgo de que la UE (Unión Europea) legitime el fraude electoral en Venezuela”, aseguró el fundador del partido venezolano Voluntad Popular a El Mundo en octubre de este año. De modo que la situación se tornó incómoda para el padre de Leopoldo López.
El Partido Popular Europeo ha retirado su participación de la misión de observación electoral a #Venezuela , no respaldamos a un gobierno dictatorial que no permite un proceso que no es verificable, transparente ni democrático. pic.twitter.com/fGAJ2SJrA0
— Leopoldo López Gil (@LeopoldoLopezG) November 9, 2021
Aplicar la coherencia
“Hay que ser coherentes”, dijo el padre de Leopoldo López para justificar la decisión. Y es que el partido que representa ya había criticado la comitiva anunciada por Josep Borrell, Alto Representante de la UE para la Política Exterior.
“No sabemos quién tiene minas de oro en Venezuela, lo que sí sabemos es que el régimen venezolano tiene una mina de apoyos con socialistas como Borrell”, fueron las declaraciones hace tres semanas de la portavoz del PP en el Parlamento Europeo, Dolors Montserrat.
No quedó allí, Montserrat criticó la posición de Borrell contra los demócratas venezolanos. Según sus palabras, reseñadas por Infobae, mientras se “muestra duro contra Leopoldo López y Juan Guaidó” es “blando con Maduro y blanquea la dictadura”.
Elecciones no solucionarán la crisis
Los anteriores cuestionamientos no son los únicos que han recibido las elecciones que se realizarán el 21 de noviembre. Que la oposición venezolana haya decidido participar no solo es contradictorio, también pone la lápida sobre el moribundo interinado de Juan Guaidó, según expertos.
Si bien se designó un nuevo Consejo Nacional Electoral (CNE) con dos rectores supuestamente opositores, también es cierto que la oposición flexibilizó la postura firme que alguna vez mantuvo cuando Guaidó se proclamó presidente interino y exigía el “cese de la usurpación” para poder pasar a una etapa de elecciones verdaderamente libres. “Participar el 21 de noviembre no resuelve absolutamente nada”, aseguró Delsa Solórzano, del partido Encuentro Ciudadano. Una verdad ineludible a pocos días del cuestionado proceso electoral.
Las elecciones del 21 de noviembre vienen precedidas por los comicios de 2020, en los que el chavismo se hizo nuevamente con el control de la Asamblea Nacional. Más de 45 países rechazaron aquellos resultados en los que solo participó el 31 % del padrón electoral, uno de los niveles de abstención más altos. La oposición que hoy participa en estos comicios regionales se abstuvo de presentarse para el proceso electoral de diciembre pasado por considerar que no había condiciones ni garantías democráticas. El discurso cambio a pesar de que el escenario sigue siendo el mismo.