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La imagen del gobernador de Nueva York se desmorona. La Casa Blanca le pidió la renuncia a Andrew Cuomo luego de que la Fiscalía General de ese estado determinara que, en efecto, incurrió en acoso sexual a varias empleadas actuales o pasadas. No conforme con eso, Cuomo también creó un ambiente de trabajo “tóxico” en el que reinaba el “miedo e intimidación”.
“Creo que debería renunciar”, declaró el presidente Joe Biden durante una rueda de prensa. El hallazgo de la instancia judicial confirma las denuncias hechas por varias víctimas hace meses. Ellas relataban cómo Andrew Cuomo las acosó con comentarios fuera de lugar o las tocó en partes íntimas. El informe no será remitido a fiscales penales, según Letita James, la fiscal del estado. Sin embargo, la solicitud de renuncia ya está sobre la mesa.
Decida dejar su cargo o no, parece que el futuro político de Cuomo quedó lapidado. Paralelamente sigue en curso una investigación de juicio político por parte del Comité Judicial de la Asamblea estatal debido a las acusaciones por el mismo motivo. Es bien sabido que ningún político o famoso logra zafarse de este tipo de casos. Un ejemplo es Al Franken, senador demócrata a quien no le quedó otra opción que abandonar su cargo en 2017. Dos mujeres denunciaron que las manoseó en episodios ocurridos en 2006 y 2010.
La investigación contra Cuomo estuvo basada en 74000 pruebas, entrevistas a 179 personas, incluyendo 11 acusadores, empleados y el propio gobernador.
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El revelador informe
En las 165 páginas emitidas por la Fiscalía aparecen las historias de las 11 mujeres acosadas por el demócrata de 63 años. Lindsey Boylan, Charlotte Bennett, Anna Ruch y Alyssa McGrath son algunas de ellas. Existe una fotografía difundida en redes sociales de Andrew Cuomo tocando la cara de Ruch, la víctima aseguró que le había preguntado si podía besarla. Ocurrió durante un evento público.
Se trata de “un cuadro profundamente perturbador, pero claro”, según las palabras de la fiscal de Nueva York. “El gobernador Cuomo acosó sexualmente a empleados estatales actuales y anteriores en violación de las leyes federales y estatales”.
Quizás lo más perturbador es que el gobernador normalizaba su conducta en el ambiente de trabajo, ya que “parecía creer que nunca se comportó de manera inapropiada”. El texto añade lo siguiente:
“Escuchamos que, como resultado, las mujeres enfrentaron un fuerte incentivo para permanecer calladas y evitar objetar el comportamiento del gobernador Cuomo, incluso si se sentían incómodas y, en ocasiones, incluso ‘completamente violadas’ por su conducta”.
La abogada laboral Anne Clark y el exfiscal federal Joon Kim —quienes dirigieron la investigación— indicaron en el reporte que encontraron “muchos otros casos” en los que el gobernador comentó sobre el atractivo de mujeres. Por ejemplo, en una ocasión, antes de que una mujer del personal entrara a su oficina, el gobernador les comentó a dos miembros masculinos del personal: “Verán por qué la contratamos”.
Acorralado por la justicia
Cuomo tendrá suerte si logra de alguna manera evadir el reporte de la justicia neoyorquina, más aún porque el FBI y la Fiscalía de Brooklyn también lo están investigando. Ambas instancias hacen seguimiento al manejo de residencias para adultos durante la pandemia del COVID-19 y encubrimiento de cifras de fallecidos.
Por lo pronto, el funcionario demócrata optó por defenderse, desestimando que el informe está basado en numerosas pruebas y testimonios. “Quiero que sepan directamente de mí que nunca toqué a ninguna mujer de manera inapropiada ni me insinué sexualmente”, declaró luego de conocerse la decisión.
Se excusó en que “uno de sus familiares había sido una superviviente de un ataque sexual cuando era adolescente”. Por eso supuestamente se acercó a Charlotte Bennett, la exasistente que trabajó en su oficina. Ella denunció que Cuomo le hizo varias preguntas incómodas sobre su vida sexual, incluyendo el hecho de haber sido víctima de un asalto sexual previo. “Pensé que había aprendido mucho de ese asunto por mi experiencia familiar, y creí que podía ayudarla a atravesar este difícil momento”, replicó el gobernador, según reseña EFE.
La Casa Blanca calificó de “aberrantes” los hallazgos de la justicia. El Partido Demócrata pide su renuncia al igual que Joe Biden. El mandatario no llegó a pedir la destitución del funcionario, pero tampoco quedan muchos caminos posibles. Quedan varias investigaciones por resolver, con un futuro nada alentador para Cuomo.
