El legado que los hermanos Fidel y Raúl Castro tanto se esforzaron por mantener está siendo erosionado. No solo se trata de las protestas en Cuba, sino del efecto que están teniendo en otras personas y países. Por ejemplo, un estudiante de una universidad en Estados Unidos solicitó eliminar una frase del dictador en una de las áreas del campus.
La iniciativa también podría dar pie a un grupo que profundice y eduque sobre personajes autoritarios escudados en el socialismo y comunismo, que tanto daño han hecho a lo largo de la historia. Erik Suárez, de 22 años, es de nacionalidad venezolana y fue quien emitió el pedido a la Universidad Estatal de Pensilvania con el apoyo de integrantes de la University Park Undergraduate Association, el gobierno estudiantil y otros grupos de la institución.
Indica un artículo de El Nuevo Herald que cuando el estudiante indagó el porqué había tal frase en una zona tan transitada por estudiantes —en este caso, el Centro Cultural Paul Robeson— la respuesta fue que la institución creyó que “Castro representaba a la cultura latina”. Finalmente se aceptó su pedido, la frase no estará más.
No se trata de un ilustre personaje, ni mucho menos. Por el contrario, fue el régimen de Fidel Castro el que hundió a la isla en una profunda crisis mientras profesaba supuestos logros de su revolución. La desinformación sobre este tipo de figuras en la universidad estadounidense es algo que el estudiante notó con su pedido.
A few days ago I posted about how my university @penn_state had a wall in a university office area with a Fidel Castro quote.
I again want to raise my voice and condemn the spread of socialist propaganda on campus, specially now with what happens in #Cuba pic.twitter.com/Aq2FVenpci
— Erik Suarez | #CubaLibre🇨🇺♥️ (@ErikSuarez24) July 13, 2021
El mayor fiasco de Fidel Castro
La dinastía de los Castro desde la silla presidencial terminó en abril de 2018 cuando el poder se le cedió a Miguel Díaz-Canel. Desde 1959 Fidel Castro ordenaba nacionalizaciones y expropiaciones, su estrecha alianza con los rusos le permitió sortear económicamente el embargo de Estados Unidos pero el escenario cambió en 1991 con la caída de la Unión Soviética.
Cuba entró en el Periodo Especial. Se contrajo el PIB, recrudeció la escasez de combustible y el racionamiento de alimentos. Fue una época gris hasta que Hugo Chávez llegó a la presidencia en Venezuela. La bonanza había vuelto gracias al petróleo de esta nación caribeña.
Este tipo de información es quizá desconocida en las universidades estadounidenses. Sumado a que en Cuba la población ve violentados sus derechos fundamentales y su soberanía como país. La economía ha sido calificada como “el mayor fiasco” del legado iniciado por Fidel Castro en 1959.
“La dirección cubana pecó de excesivo idealismo y de voluntarismo en la conducción de la economía. Siempre se priorizó la razón política y el mantenimiento del poder sobre la razón económica”, declaró en 2019 a BBC Mauricio De Miranda Parrondo, economista cubano y profesor de la Universidad Javeriana de Cali.
El control draconiano
También ha habido represión, mucha. Human Rights Watch (HRW) emitió un informe en 2016 en el que citaba que durante las casi cinco décadas que gobernó Cuba, impuso un sistema represivo que castigó prácticamente todas las formas de disidencia. Un legado que lamentable perdura luego de la muerte de Fidel Castro.
“El régimen represivo creado por Fidel Castro pudo mantenerse en pie durante décadas gracias a un control draconiano que incluía duros castigos impuestos por el gobierno a quienes se atrevían a disentir mínimamente”, declaró José Miguel Vivanco, director para la Américas de HRW.
Los abusos quedaron oficializados en la ley cubana, aplicada por las fuerzas de seguridad, grupos de civiles alineados ideológicamente con el Estado y un poder judicial subordinado. “Estas prácticas abusivas instalaron en Cuba un clima de temor permanente que coartó el ejercicio de derechos fundamentales”.
Las protestas en Cuba son una muestra del cruel legado. No hay comida y la poca que hay, está a la venta en dólares. El funcionamiento de los servicios básicos está por el piso, el internet está controlado por el régimen y el país entero quedó relegado en el tiempo, sin avances. Mientras tanto, cientos de personas están presas arbitrariamente solo por pensar diferente.