La pandemia por el coronavirus trajo consigo una lista de desaciertos para la OMS, la misma organización lo reconoció recientemente en un informe de su autoría. Ahora, su última inspección arrojó varios sospechas, sin muchos resultados.
Luego de terminar su visita a China, la OMS aseguró que 92 personas fueron hospitalizadas con neumonía y síntomas similares al coronavirus en octubre de 2019. Dos meses antes que el régimen chino lo reconociera por primera vez en Wuhan. Es decir, que el virus ya se estaría propagando.
Sin embargo, estos expertos añadieron que autoridades chinas hicieron pruebas de anticuerpos en aproximadamente dos tercios de esos pacientes en los últimos meses, en los cuales “no se encontró rastro de infección”. Los especialistas sugieren que a estas alturas los anticuerpos pudieron haber bajado a niveles indetectables. El retraso pudo haber sido determinante ya que estos aumentan cuando la persona se contagia.
Aseguran que presionaron a China para que permitiera más pruebas que determinen si el virus se estaba propagando antes de lo que se supo, según The Wall Street Journal.
En el afán por defender su “manejo exitoso del virus”, Liang Wannian, jefe del panel de expertos COVID-19 de la Comisión Nacional de Salud de China enumeró la cantidad de registros médicos que habrían revisado. Supuestamente en ninguna muestra de sangre se encontró evidencia del virus antes de diciembre de 2019.
“Se necesitan más estudios”, dijo Peter Ben Embarek, presidente del equipo de investigación de la OMS.
Los 92 sospechosos
Estos investigadores de la OMS, que formaron parte de la delegación en China, dijeron que recibieron registros médicos de las autoridades relacionadas con estos 92 casos de las 233 instituciones encuestadas por las autoridades chinas en todo Hubei, agregó WSJ.
Pero en los análisis mencionados por Liang Wannian tampoco participaron todos esos casos. Aproximadamente un tercio había muerto o se había negado a participar, dijo Embarek. El resto dio negativo en las pruebas serológicas que buscan anticuerpos.
“Esto es tan políticamente tenso”, dijo Maureen Miller, epidemióloga de enfermedades infecciosas de la Universidad de Columbia a WSJ. “Probablemente estaba circulando mucho más ampliamente de lo que creían… Haciendo pruebas de anticuerpos ahora, es demasiado tarde. El barco ha zarpado”, añadió.
Culminó la visita de la OMS
El equipo de expertos pasó cuatros semanas en China. En su balance final se mostró cauto y no ofreció demasiados resultados, además el jefe de la Comisión China tomó la palabra en varios puntos. No mencionaron a los 92 casos con síntomas similares al COVID-19, de los cuales no hay pruebas más allá de sospechas.
Durante la presentación del balance tampoco arrojaron claridad sobre el origen del brote. El jefe del panel de expertos COVID-19 por China dijo que podría haber existido una circulación no informada de coronavirus en otras regiones antes de Wuhan. Al mismo tiempo dijo que no encontró evidencia de grandes brotes que pudieran estar relacionados con el COVID-19 antes de diciembre de 2019 en Wuhan o en otro lugar, y que tampoco se halló una circulación más amplia fuera del grupo de mercado de Huanan, replicó Infobae.
La comisión habría contemplado cuatro escenarios de acuerdo a France 24: la primera indica que un animal podría haber transmitido el virus directamente a los humanos. La segunda, que se podría haber dado la introducción del virus a través de una especie intermedia, donde el virus se pudo haber adaptado. La tercera opción plantea que el virus podría haberse almacenado en la cadena de suministros de animales congelados y de ahí haberse transmitido a los humanos. Y por último, los investigadores indagaron sobre la posibilidad de que el virus hubiese sido fabricado en un laboratorio.
La cuatro quedó descartada por la OMS, el resto sigue abierta a investigaciones. “Murciélagos y pangolines son candidatos potenciales para la transmisión, pero las muestras de coronavirus encontradas en esas especies no son idénticas al SARS-CoV-2”, agregó el jefe del panel de China.
China aprovechó la falta de resultados
China aprovechó al instante la poca claridad y falta de resultados de la investigación para impulsar sus teorías sobre el origen del COVID-19. El periódico China Daily bajo el control del régimen tituló: Misión de la OMS: la investigación sobre el origen de los virus no debe tener ‘límites geográficos’. Asomando que el COVID-19 supuestamente se apareció fuera del país.
Global Times, otro medio comunista afirmó que la OMS estaba preparada para investigar el sudeste asiático como posible ubicación original del virus.
Una de las teorías del régimen es que el virus llegó a China a través de alimentos congelados. La OMS no descartó esa teoría, pero la falta de resultados tampoco le permitió comprobar su veracidad. Ese vacío fue aprovechado por el Partido Comunista.
“El equipo está trabajando hasta la partida (de China). Es solo el comienzo del camino, con mucho trabajo por hacer después de las pistas de nuestros colegas en China. Muy orgulloso de nuestros logros y realista sobre lo que queda”, dijo hoy el zoólogo británico Peter Daszak, miembro de la misión.
Nueva cepa en Tailandia
Entre las últimas novedades, está el descubrimiento de una nueva mutación del virus. Esta se suma a las nuevas cepas de Reino Unido, Sudáfrica y Brasil, más contagiables según expertos.
La mutación fue detectada en murciélagos de Tailandia. Según New York Post, la revista Nature Communications detalló la cepa RacCS203 estaba en los animales dentro de una cueva artificial en un santuario de vida silvestre. La investigación, hecha por un equipo dirigido de la Escuela de Medicina Duke-NUS en Singapur, determinó que comparte el 91,5 % del código genético de Sars-CoV-2.
El descubrimiento incluye una alerta. Las variantes de coronavirus están más extendidos en los animales de Asia de lo que se sabía anteriormente, afirmaron los investigadores.