Juan Guaidó le falló al país. Ya ni siquiera es algo que nada más repite el chavismo para dañar la reputación de la coalición opositora, ahora la dirigencia que acompaña al mandatario interino, en menor o mayor escala, también visibiliza esta constante que se ha hecho evidente, tras casi dos años desde el inicio de su gestión al ser designado por la Asamblea Nacional.
Una de esas voces que hoy aboga porque haya entendimiento desde el interinato es Antonio Ledezma. El exalcalde metropolitano de Caracas indicó que le ha dicho a Juan Guaidó “que se deje ayudar” en reiteradas oportunidades. Estas sugerencias han sido ignoradas de alguna u otra forma, en vista de los resultados que hoy mantienen a la ciudadanía aún sumida en una profunda crisis sociopolítica.
Ledezma explicó en una entrevista al diario El Nacional los pormenores que en su opinión han ocurrido desde el inicio de esta gestión. Insistió también que para retomar el camino de sitiar al régimen de Nicolás Maduro es necesario que los actores políticos vuelvan a coordinarse y así lograr la libertad del país.
“En estos casi dos años de gestión (de la presidencia interina) los venezolanos hemos estado bamboleándonos de la euforia al abatimiento. Tratamos de no perder la esperanza en medio de estos sentimientos”, aseveró.
Y en ese ápice de esperanza al que hace referencia el dirigente exiliado en España, reposa el mantra que para el 2021 pretende mantener la oposición: cese de la usurpación, gobierno de transición y elecciones libres.
Aunque dicha estrategia en algún momento parecía unir a la disidencia del chavismo, hoy se ve difusa ante la consumación del fraude electoral impulsado por el chavismo y la poca credibilidad que dejaron los resultados de la consulta popular, un evento que mostró ciertas costuras que no terminaron por convencer a la propia ciudadanía venezolana.
El distanciamiento de Guaidó cada vez más visible
La testarudez de Guaidó tiene un alto precio. Hoy Venezuela vive un escenario poco alentador que se vislumbra aún más difuso luego del 5 de enero. Los diagnósticos son urgentes y todos van enfocados en un mismo punto: el diálogo. Sin embargo, como lo plantea Ledezma, no se trata de hablar o negociar con el chavismo, sino de llegar a un acuerdo entre la dirigencia opositora.
“Nosotros (la oposición) somos los que debemos dialogar entre nosotros mismos, para que se pueda dar una conducción coherente, con una estrategia firme, que la debatamos una y otra vez, hasta tenerla clara, pero con una oposición libre de sospechas, sin infiltrados”, agregó.
Esta recomendación es muy necesaria, tras ver cómo de a poco los espacios se van empequeñeciendo para el interinato. Muestra de ello es la cautela que tiene la Unión Europea y Estados Unidos al tocar el tema de Venezuela, un tópico que se abordará en enero, según Deutsche Welle.