El dirigente izquierdista español Pablo Iglesias no esconde su agrado por los resultados en las elecciones presidenciales de Bolivia. De hecho, lo manifestó en un recibimiento a embajadores de países de la Unión Europea en España en una reunión este lunes, mediante el uso de la ‘wiphala’, una insignia de los pueblos originarios de América.
Iglesias usó en su cubrebocas, esta bandera destacada por ser una insignia indígena, con lo que aprovechó para hacer un guiño al partido izquierdista MAS, al cual dan los sondeos como victorioso en los comicios de este fin de semana en Bolivia, así como también al remonte del discurso de corte progresista en tierras bolivianas.
Esta táctica de ensalzamiento también ha sido utilizada en algunas ocasiones por Nicolás Maduro. Es su modo de usar la insignia como emblema de su “revolución”.
El mensaje
Previo al encuentro con los diplomáticos, el dirigente de Podemos aprovechó para referirse en Twitter a los datos de las elecciones en Bolivia sobre el MAS, que también es la tolda del expresidente Evo Morales y facción política que acompaña a Luis Arce: «Dejaron votar a los bolivianos y lo han vuelto a decir muy claro. Nueva victoria histórica del Movimiento al Socialismo y lección ciudadana al golpismo. Felicidades, presidente Lucho».
Dejaron votar a los bolivianos y lo han vuelto a decir muy claro. Nueva victoria histórica del Movimiento al Socialismo y lección ciudadana al golpismo. Felicidades presidente @LuchoXBolivia
— Pablo Iglesias ? (@PabloIglesias) October 19, 2020
Estas elecciones eran un punto de honor también para la izquierda en Europa. Por ello, Pablo Iglesias mandó a dos diputados de su grupo parlamentario a Bolivia la semana pasada, pese al confinamiento existente en Madrid, reseñó Ok Diario.
La finalidad de este viaje de los parlamentarios Gerardo Pisarello y Lucía Muñoz Dalda fue estar como «invitados» electorales por el partido MAS. Posteriormente, la Comisión de Exteriores del Congreso español aclaró que no se envió ninguna delegación a Bolivia.
Pablo Iglesias y los turbios negocios con Evo Morales
La relación entre Iglesias y Morales va más allá de las afinidades por ideologías políticas. A esta camaradería se le suma un tema de carácter pecuniario.
De acuerdo con El Mundo, bajo la presidencia de Evo Morales, el Gobierno de Bolivia pagó al menos 1,3 millones de euros a la consultora mexicana Neurona Consulting, compañía que se encuentra estrechamente vinculada a Podemos.
Entre los detalles de la investigación se explica que Neurona Consulting cobró este dinero en diciembre de 2018. Tres meses después, el capital llegó a España para fondear las campañas del partido de Iglesias, quien funge actualmente como segundo vicepresidente del Gobierno español.
La empresa especialista en audiovisuales y propaganda está asociada a Juan Carlos Monedero, uno de los fundadores y estrategas principales del partido Podemos.
La nota de El Mundo aseveró también que los pagos hechos desde el Gobierno boliviano fueron un abono por la realización de 169 videos pequeños, de entre 30 segundos y dos minutos, así como otro tipo de material audiovisual para dar mayor visibilidad a los logros de Morales.
La mano socialista en las elecciones de Bolivia
La izquierda toma un espacio nuevamente en Suramérica. A Venezuela y Argentina se les une Bolivia en un juego de poderes que amerita una mirada al tablero, para conocer el camino que toma la región.
La lectura de este triunfo, más allá de un regreso al poder del partido MAS, tolda política de Evo Morales, ofrece una mirada a cómo aliados ideológicos también hacen sus apuestas y entran al juego del poder en el Sur.
Una muestra de ello se dio con el refugio que le dio Argentina, bajo la sombra de Alberto Fernández, a Evo Morales. Desde su llegada en 2019 a dichas tierras, el expresidente no cedió un centímetro en su agenda de abonar el terreno para darle poder a la izquierda de nuevo en Bolivia.
El laboratorio de Evo Morales en Argentina
Evo Morales no disimuló su campaña para que el partido MAS alcanzara nuevamente el poder, a pesar de su condición de refugiado político. Este cometido lo logró con la llegada de Luis Arce a la Presidencia, según los primeros sondeos que se dieron este lunes.
Sin embargo, Evo Morales no actuó solo. Desde Argentina, un territorio en manos de un Gobierno con políticas completamente afines a la izquierda, también se gestaron movimientos de agitación que contribuyeron, ya sea en mayor o menor escala a que ganara MAS.
En un país con jefes políticos que se decantan por este pensamiento, Morales se sintió a sus anchas.
Inició una agenda de agitación y de acuerdo con el encargado de negocios de Bolivia en Buenos Aires, Julio Alvarado, citado por Infobae, varios sectores del Movimiento Evita, la CTEP, la CCC y referentes del PJ participaron también en forma activa en distintos puntos del país para disuadir al electorado boliviano.
Analistas de Bolivia aseguraron en su momento que con la ayuda de apenas 2 % del voto extranjero concentrado en Argentina se podría dar vuelta el resultado electoral. Se estimaba que de ese 2 %, más de 1,5 % votaría a favor del candidato del MAS, según Infobae.