Como suele suceder en Argentina, sobre todo en el peronismo, Cristina Fernández de Kirchner se niega a abandonar la centralidad política. Aunque ya tuvo un rol relevante, fue dos veces presidente, una vez vicepresidente, diputada y senadora, ella quiere seguir estando debajo de los reflectores. No le importa tener una imagen negativa más alta que la positiva, perjudicando incluso a su propio espacio político.
José ‘Pepe’ Mujica, con el que uno puede tener importantes disidencias políticas, al menos tomó su momento de poder de una forma mucho más sana. No solamente dejó de lado sus objetivos de la juventud, cuando se suscribió a la lucha armada, sino que tuvo un estilo de vida más que austero cuando ejerció la Presidencia de Uruguay. A diferencia de muchos políticos, luego se retiró y se dedicó a apoyar a su frente desde la distancia. La última vez que lo hizo fue en la pasada campaña presidencial, donde la coalición de izquierda ganó las elecciones con Yamandú Orsi. El expresidente Mujica respaldó los actos, se presentó a votar y volvió a su casa.
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Kirchner, multiprocesada y condenada, es el ejemplo de todo lo contrario: acaba de “triunfar” en las elecciones internas del peronismo (judicialmente, ya que no se presentó en las urnas, luego de impugnar los avales de su competidor) y apunta a ser candidata en 2025. Lógicamente, quiere volver a postularse a la Presidencia en 2027, cuando tendrá 74 años.
“Ahí está la vieja Kirchner en la Argentina, al frente del peronismo. En lugar de ponerse de vieja consejera y dejar nuevas generaciones, no, está jodiendo ahí. ¡Cómo les cuesta largar el pastel!”, cuestionó duramente Mujica. Y tiene razón.
En 2013, Mujica ya había tenido expresiones similares sobre Cristina Kirchner, que también llegaron a los medios internacionales. Se encontraba en una conferencia de prensa charlando con periodistas, y sin saber que tenía el micrófono conectado, dejó una frase para el recuerdo: “Esta vieja es peor que el tuerto”, dijo, comparando a Cristina con su fallecido esposo, Néstor.
Como sucedió en aquella oportunidad, desde el kirchnerismo miraron para otro lado. José ‘Pepe’ Mujica es uno de los mayores referentes de la izquierda internacional, por lo que sus expresiones resultaron más que incómodas. Por lo tanto, silencio de radio y a esperar que el tema desaparezca de las noticias.