Curioso. El kirchnerismo fue el espacio político que reparó de forma permanente en los riesgos de la pandemia del coronavirus y el que impuso las restricciones más salvajes que fundieron al sector privado. Claro que, mientras se rasgaban las vestiduras y encerraban al país, el presidente y su mujer celebraban sus fiestas en la Quinta de Olivos como si nada pasara.
También especularon con el proyecto geopolítico propio a la hora de conseguir las vacunas que, lógicamente, les dieron primero a sus amigos. Sin embargo, Cristina Fernández de Kirchner fue muy lejos en su última carta. Incluso para los parámetros del kirchnerismo que de por sí ya son impresentables.
- Lea también: Récord de contagios en Argentina y una víctima necesaria: la fe en el Estado
- Lea también: ¿Qué fue a hacer Úrsula Vargues a la Quinta de Olivos?
A pesar de los casi 120.000 muertos que dejó hasta el momento el COVID-19, CFK, en medio de la negociación con el Fondo Monetario Internacional, hizo pública una misiva en la que aseguró que la “pandemia macrista” fue “peor” que la llegada del coronavirus al país. Lamentable.
Evidentemente, las conversaciones con el organismo internacional, con respecto al vencimiento de marzo, no caminan de la mejor manera. En los últimos días, fuentes del Ministerio de Economía reconocieron que todo se enfrió y que la resolución del asunto es incierta. El oficialismo se negó esta semana a presentar la estrategia ante la oposición en el Congreso, lo que no hizo más que incrementar las dudas y el hermetismo sobre la cuestión. Para el diputado opositor Ricardo López Murphy, el ministro Martín Guzmán no estaba dispuesto a enfrentar las preguntas concretas sobre el trato con el FMI, por lo que decidieron esquivar el bulto y cancelar la reunión.
“Se puede advertir con mucha facilidad que, en el año 2021, la pandemia macrista fue para el Estado Nacional incluso más costosa que la pandemia COVID-19”, señaló en su texto la vicepresidente. Claro que Cristina hace referencia a la deuda del gobierno de Cambiemos, pero no se hace cargo de la misma. Como si Mauricio Macri hubiera heredado un país normal en diciembre de 2015.
Como era de esperar, la oposición rechazó fuertemente el comunicado, que no tuvo otra finalidad que distraer la atención de los medios y “abrir el paraguas” ante un eventual fracaso en la negociación con el Fondo. “Cristina Kirchner banaliza y frivoliza la muerte de 120.000 personas por el COVID-19 al hablar de pandemia macrista. Solo una persona mala y con mucho odio puede hacer eso”, aseguró el jefe de bloque de Juntos por el Cambio en Diputados, Mario Negri. “Todos los que perdimos familiares y amigos no olvidamos lo que nos hizo su gobierno por privilegiar la geopolítica y los negocios a nuestras vidas”, señaló la macrista Silvia Lospennato.