Se trataba de un audio privado. Un mensaje de WhatsApp que Gustavo Lazzari compartió con un grupo de amigos, pero alguien decidió “reenviar” y terminó viralizando. Las palabras del economista liberal, donde analiza el intento de expropiación del Gobierno de Alberto Fernández a la empresa Vicentin, llegaron a miles de teléfonos a lo largo y ancho de Argentina.
En la grabación “Lacha” define el proyecto de expropiación en tres palabras: “Robo, mala justificación y señal”. Para el popular referente del liberalismo argentino la iniciativa es un “robo por encargo, como los del hampa”. Según su punto de vista, bastante lógico por cierto, lo único que debería activarse ante la crisis financiera de la compañía es el inicio de los mecanismos del derecho privado como la convocatoria de acreedores o la quiebra. “En un país normal, Vicentin tendría acceso al crédito de largo plazo para solucionar su problema de corto”.
Con respecto a las justificaciones que brindó el Gobierno de la “soberanía alimentaria” y la necesidad de la “empresa testigo”, Lazzari fue contundente. Advirtió que la cuestión de la “soberanía” es “una estupidez” que no merece siquiera un comentario. Con respecto al segundo tema, el economista señaló que no tiene ninguna razón de ser, ya que esa figura se utiliza cuando se necesita bajar los precios. “Vicentin vende en el exterior… necesita subir los precios no abaratarlos. El argumento de la empresa testigo es el más boludo de todos”.
Finalmente, con la referencia a la “señal”, el economista —que también es propietario de una pyme familiar— aseguró que con la estatización las empresas del sector privado ahora perciben que el Estado te expropia cuando quiere. “Dan tres argumentaciones boludas para los centros urbanos y te roban. ¿Conclusión? El que invierte es un imbécil”.
El lenguaje claro, informal y explícito hizo lo suyo y en cuestión de horas su audio viralizado terminó en los medios de comunicación. En una de las entrevistas televisivas brindadas, Lazzari dejó una advertencia: que la empresa podría ser expropiada para beneficiar a un “empresario” cercano al Gobierno.
Ante la consulta del periodista sobre las razones detrás de la expropiación, el economista afirmó: “Están robando una empresa y se la van a vender a un amigo”. “¿Vos creés que se lo van a dar a un capitalismo de amigos?”, preguntó Jonatan Viale. “Pero obvio… es de manual”, respondió Lazzari.
Cabe destacar que en las últimas horas Alberto Fernández dijo que el Gobierno intervenía por temor a que una empresa extranjera se haga de Vicentin. El pobre argumento nacionalista no hace otra cosa que validar la sospecha de Lazzari.
Por ahora, el Congreso tendrá que discutir la expropiación de la empresa intervenida. La oposición votará en contra y el cristinismo a favor. ¿Habrá una grieta dentro del peronismo que frustre los planes de Fernández? Habrá que ver.