“Lo vi preocupado por el pueblo argentino y por la deuda, hará lo que pueda para ayudarnos”, resaltó el presidente argentino, Alberto Fernández, luego de su primera visita al papa francisco en el Vaticano.
Según el mandatario, se trató de “una reunión muy grata”, donde conversaron sobre lo que ocurre en el país. Tras la entrevista, Fernández aseguró que Bergoglio “comparte el diagnostico” que él hace sobre el problema de la pobreza y la inflación.
A la hora del clásico intercambio de los regalos, el presidente argentino le obsequió al papa un busto del Negro Manuel, un personaje del Siglo XVII relacionado a la Virgen de Luján que la iglesia nacional busca beatificar y un talar artesanal hecho por jóvenes con discapacidades. Por su parte, Francisco le entregó una escultura con forma de medallón que tiene un olivo, una vid y una paloma, que supuestamente simboliza la paz. “Esto lo elegí yo, sean mensajeros de la Paz, porque esto es lo que necesita Argentina”, habría manifestado el papa.
Entredicho por el aborto
Fernández se ha manifestado en campaña en favor de la legalización del aborto, al igual que la mayoría de su espacio peronista del Frente de Todos. Lógicamente, este tópico era uno de los puntos que más llamaban la atención a la hora de imaginar lo que podía conversarse en la reunión del presidente argentino con el papa. La afinidad de Bergoglio con Fernández y su espacio es clara, pero con respecto a este tema la iglesia es intransigente.
Lo que sucedió fue que Alberto Fernández aseguró que el aborto “no estuvo” presente en ningún momento de los 44 minutos de lo que duró la entrevista. Sin embargo, el Vaticano salió a desmentir al Jefe de Estado argentino mediante un comunicado donde aseguró que el tema sí fue abordado.
“Durante las cordiales conversaciones, se expresó satisfacción por las buenas relaciones existentes entre la Santa Sede y la República Argentina. Posteriormente, se examinó la situación del país, con especial referencia a algunos problemas como la crisis económico-financiera, la lucha contra la pobreza, la corrupción y el narcotráfico, la promoción social y la protección de la vida desde su concepción”, aseguró el informe de prensa vaticano.
¿Cuándo vuelve Bergoglio a su país?
El papa argentino, Jorge Mario Bergoglio, ocupa el puesto más alto de la Iglesia Católica desde hace seis años. Su elección tuvo lugar el 13 de marzo de 2013, a mediados del segundo Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner. Sin embargo, Francisco nunca visitó su país de origen ni se expresó con deseos de hacerlo hasta el momento.
Fernández se expresó luego de la reunión al respecto y sugirió que la famosa “grieta” (enfrentamiento político en la sociedad del kirchnerismo y el antikirchnerismo) es la causa del problema:
“El papa y yo tenemos una obsesión que es unir a los argentinos. La Argentina tiene que terminar con el tiempo de las diferencias. Hay que respetarnos. Cuando eso pase, el Papa vendrá al país”.