“Buenos Aires, 6 de enero de 2020. De mi mayor consideración: Me dirijo a Usted a los efectos de comunicarle que a partir del día de la fecha se pone fin a su misión especial en la República Argentina y a sus funciones dentro de la misma. Sin otro particular, saludo a Ud. atentamente”. El documento oficial, dirigido a Elisa Trotta Gamus, que lleva la firma de María Ángeles Bellusci, directora nacional de Ceremonial del Ministerio de Relaciones Exteriores, confirmó que a partir de ahora para Argentina el único representante político venezolano es el encargado de negocios de Nicolás Maduro, Juan Valero Nuñez.
Desde la Cancillería argentina argumentaron que Gamus era presentada “persistentemente” como Embajadora, por lo que era necesario aclarar que “no lo es”. Desde el ministerio de Relaciones Exteriores, en claro modo de excusa, indicaron que la funcionaria que responde a Juan Guaidó “estaba bajo el formato de misión especial que le había dado la gestión anterior, no como embajadora formalmente de Venezuela”.
La noticia fue recibida por los medios con sorpresa, ya que el fin de semana el canciller argentino, Felipe Solá, criticó duramente al chavismo por el intento de golpe a la Asamblea. Para muchos analistas, el comunicado del fin de semana y la resolución de hoy responden a una interna dentro del mismo Gobierno. Para ser más claros, la de un eventual cortocircuito entre Alberto Fernández y su vicepresidente, Cristina Kirchner.
“Se había puesto como loca”
Fernando Iglesias, diputado nacional de Juntos por el Cambio, se manifestó en redes sociales y abonó la teoría del kirchnerismo enojado a raíz de la resolución del fin de semana emitida por la Cancillería. Desde su cuenta de Twitter, Iglesias indicó que Cristina “se había puesto como loca”.
Se acabó la tercera posición. Cristina se había puesto como loca. @felipe_sola @alferdez https://t.co/O7k53UgLhw
— Fernando A. Iglesias (@FerIglesias) January 7, 2020
En otro comentario, el periodista y legislador argentino se dirigió directamente al presidente, Alberto Fernández, y a su canciller, Felipe Solá. Ante la contradicción de respaldar a Guaidó, pero a la vez quitarle las credenciales a su embajadora, el diputado le preguntó a Fernández: “¿Manda usted o quién, presidente?”
Si el mando no está en la cabeza del Poder Ejecutivo, como sugiere Iglesias, Argentina puede volver a tener serios problemas como los tuvo en otras épocas, cuando el peronismo había puesto a alguien en la Presidencia, pero el poder real estaba en otro sitio.
Presidente @alferdez Canciller @felipe_sola
Reconocemos a @jguaido o le quitamos las credenciales a su embajadora @EliTrotta ?
Manda usted o quién, presidente?https://t.co/tbKx6csYRo— Fernando A. Iglesias (@FerIglesias) January 7, 2020