Atilio Boron es probablemente uno de los últimos voceros del chavismo en Argentina. Ya ni la expresidente Cristina Fernández de Kirchner, ni los partidos de izquierda se animan a mencionar a Venezuela en sus apariciones públicas.
En una reciente entrevista, el intelectual y escritor argentino declaró que Hugo Chávez fue asesinado y que Nicolás Maduro debería “usar el ejército para aplastar a los opositores”, brindó nuevamente insólitas declaraciones.
Ante la consulta de la periodista sobre la responsabilidad del gobierno venezolano por la situación actual, Boron destacó que el único responsable por la crisis es el gobierno de Estados Unidos.
“Lo que hay en Venezuela es una pugna para tratar de destruir el proyecto revolucionario que empezó con Chávez y que tiene como motor fundamental un dato del que tampoco se habla. Es que Venezuela tiene la reserva más grande de petróleo del planeta tierra, más que Arabia Saudita y los Emiratos, y Estados Unidos lo tiene a tres días y medio de navegación con su buque cisterna y lo que buscan ellos es recuperar el control del petróleo venezolano. Entonces arman todo esto a los efectos de tumbar a Maduro, poner a los propios y recuperar el petróleo“.
Para el escritor el plan de derrocamiento está basado en la estrategia de Gene Sharp en el libro “De la dictadura a la democracia” y apunta a que la situación termine con un alzamiento y Nicolás Maduro “muerto a palos como ocurrió con Gadafi”.
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Pero, más allá de los lugares comunes de la izquierda para tratar de justificar los desastres de un nuevo intento socialista, Boron se las rebuscó nuevamente para ofrecer nuevos comentarios desopilantes:
A la hora de encontrar algún defecto del gobierno venezolano, el escritor manifestó que “mucha gente en Venezuela lo acusa de tener mano blanda” con los responsables de la crisis, es decir, los capitalistas especuladores responsables del desabastecimiento y los violentos manifestantes.
“Hay una guerra económica, yo viví en el Chile de Allende donde también había desabastecimiento planificado. Esto se planifica científicamente. Un día desaparece el café, durante tres días desaparece y cuando vuelve a aparecer no tenés azúcar. Después desaparecen los pollos y cuando aparecen los pollos desapareció el aceite”, manifestó el escritor argentino.
Fuente: Canal Abierto