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Durante el lanzamiento de campaña a senadora de Cristina Fernández de Kirchner en la ciudad de Mar del Plata, la expresidente eligió la misma temática que en su presentación anterior: ella tuvo el rol de única oradora, pero estuvo acompañada por diversos ciudadanos que contaron los dramas personales que sufren desde el inicio del Gobierno de Mauricio Macri.
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Cual directora de televisión experimentada, la expresidente manejó los tiempos en el escenario priorizando los relatos más conmovedores en la voz de los mejores expositores. A discurso más claro, más tiempo en el escenario. Si la cosa no conmovía, la misma expresidente pedía a sus seguidores: «Cortito, por favor». En varias oportunidades Kirchner era la encargada de llevar el micrófono en sus manos.
Uno de los relatos más destacados de la jornada fue el de Gabriel, el taxista. Con un tiempo privilegiado de 5 minutos en el escenario, el chófer conmovió hasta las lágrimas a los asistentes (dispuestos a emocionarse con cualquier cosa que escuchen en el escenario) y se llevó un abrazo de la expresidente, que lo consolaba y le brindaba su apoyo durante su discurso.
«Desde hace 18 meses, la ciudad de Mar del Plata está muerta y cada día que pasa se muere más. Todo diez mil veces peor. Comercios que cierran, puerto fantasma, me tiene podrido el taxi y Macri», manifestó el taxista sobre el escenario.
Ante la mirada atenta de Cristina, Gabriel destacó lo duro de la vida del taxista. Resaltó que comen mal, que tienen problemas cervicales, que ganan poco dinero y que los que trabajan de noche sufren «la mayor tasa de divorcios».
«Hoy todos caminan abrigados y ves que te miran con ganas de subir. Lo notás, años de calle te lo dicen. Pero no se puede. Está la luz, el gas, el pan, la carne y la leche», destacó en relación con el aumento de precios en Argentina.
Si bien es claro que la selección de los ciudadanos indignados para estos eventos es arbitraria y que difícilmente la expresidente suba a alguien al escenario que sea crítico de su gestión, el portal La Política Online reveló que el taxista, no solo no es un ciudadano apolítico, sino que milita en la agrupación peronista «Descamisados».
Resulta que «Gabriel, el taxista» es Gabriel Fernándes y junto a Descamisados Mar del Plata trabaja políticamente para el concejal kirchnerista Macros Gutiérrez. La agrupación en la ciudad está dirigida por Marcelo Koenig, candidato a diputado nacional por el Frente Unidad Ciudadana de Cristina Kirchner.
Fuente: La Política Online.
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