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El exjefe de inteligencia de Cristina Fernández de Kirchner, Oscar Parrilli, realizó una impúdica y vergonzosa defensa del régimen venezolano por televisión. No solo justificó el desastre económico, sino que también se animó a avalar la represión gubernamental, ante la mirada atónita del periodista.
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Con relación a las dos víctimas fatales de esta semana el exfuncionario opinó que «no fallecieron en los enfrentamientos», sin brindar mayores detalles de los trágicos sucesos.
«Acá vemos cómo los manifestantes van con la cara tapada. Yo no se qué dirían si acá algunos decidieran hacer lo mismo en Argentina. Ahí había gente que fue con gases y bombas a destruir bienes públicos, directamente a provocar», destacó.
Sobre la cobertura periodística en Argentina sobre el conflicto venezolano Parrilli afirmó que existen marchas multitudinarias a favor del gobierno, que los medios de comunicaciones esconden.
«Hay una manipulación mediática donde Maduro fue condenado. Maduro es malo…» afirmó Parrilli al momento de ser interrumpido por el conductor del programa que le dijo: «Pero quiso anular el Congreso…» Ante esa situación difícil de refutar el dirigente kirchnerista eligió la siempre vigente salida de la izquierda: «Maduro no aceptó ser un subordinado de Estados Unidos», como si esa respuesta significara algo concreto en relación a la pregunta.
Por si quedaba alguna duda el exencargado de los servicios de inteligencia realizó un paralelismo entre la dictadura que sufre hoy Venezuela y el gobierno de los Kirchner: «A Maduro le critican los aciertos, no los errores. Lo mismo nos pasa a nosotros».
Finalmente justificó los desabastecimientos y el desastre causado por la escasez de productos básicos con una sola respuesta: «Es un boicot económico».
Fuente: A24
