El socialista Pedro Sánchez pretende reducir en consumo eléctrico “en línea con lo que están haciendo todos los países europeos”. Las medidas que sugiere incluyen quitarse la corbata para aportar. Lo mismo pide para su gabinete. Sin embargo, la capital de los españoles no se suma a su plan. La presidente de la comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, dejó en claro que Madrid no se apaga.
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A partir de agosto rige en España un paquete de medidas para cumplir con la reducción de consumo de gas del 7 % solicitado por la Unión Europea. Dado que Rusia es el mayor exportador de gas a la zona, la guerra en Ucrania lleva a la región a la austeridad.
Ha causado polémica el tema de la corbata, en cuanto no es claro para qué serviría. La idea es que los hombres estén menos abrigados y por ende puedan resistir el calor. Dado que entre las medidas del mandatario socialista está la reducción del uso del aire condicionado, en particular la reducción de la temperatura.
Por decreto, la temperatura en los edificios administrativos, espacios comerciales o culturales, hoteles, cines o estaciones en verano no podrá ser inferior a 27 grados en verano, mientras que la calefacción no podrá superar los 19 grados. Para cumplir, deberán instalar termómetros que sean fácilmente visibles para comprobar el cumplimiento de la medida.
Pero no contará con la Comunidad de Madrid. Díaz Ayuso anunció que la capital de España no apagará la luz de los edificios públicos ni de los escaparates del comercio exterior. Acusa que generará “inseguridad” y espantará “el turismo y el consumo”.
“Provoca oscuridad, pobreza, tristeza, mientras el Gobierno tapa la pregunta: ¿qué ahorro se va a aplicar a sí mismo?”, reprochó.
Por parte de la Comunidad de Madrid no se aplicará. Madrid no se apaga.
Esto genera inseguridad y espanta el turismo y el consumo.
Provoca oscuridad, pobreza, tristeza, mientras el Gobierno tapa la pregunta: ¿qué ahorro se va a aplicar a sí mismo? https://t.co/3nDyfnwsxb
— Isabel Díaz Ayuso (@IdiazAyuso) August 1, 2022
Madrid creció económicamente más que toda España
La consigna “Madrid no se apaga”, aplica tanto en el tema energético como económico. La capital de los españoles ha desafiado en reiteradas ocasiones al premier socialista. Mientras Sánchez mantuvo a España cerrada por causa del coronavirus, Madrid quedó abierta. Las consecuencias económicas fueron inmediatas.
Madrid creció 4,5 % en el tercer trimestre del 2021, en comparación con el mismo periodo del año pasado. Es decir, superó los niveles prepandémicos. Al hacerlo, incrementó cerca de 2 puntos por encima del país; que se mantuvo cerrado por orden de Sánchez.
“Yo entiendo que pedirle a un comunista que entienda de datos económicos es como pedirle a un neandertal que entienda de internet”, espetó Isabel Díaz Ayuso cuando explicó por qué Madrid ha crecido cerca de 2 puntos por encima de toda España.
Acusan de “insolidaridad” a municipios que no adhieren
Ahora que el socialismo internacionalista tiene un tinte ambientalista, Ayuso deberá enfrentarlos en este ámbito también. El Gobierno socialista califica de “temeridad” e “insolidaridad” a los gobiernos autónomos que no adherirán al plan energético de Sánchez.
Así lo declaró la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera. Entre otras medidas, pretenden obligar a los gobiernos locales a mantener sus puertas cerradas cuando estén funcionando sus sistemas de calefacción o refrigeración.
Vox propone más soberanía energética y menos sumisión a la UE
Por su parte el número uno de Vox señala el carácter prohibitivo de la medida. Y cómo el partido socialista apunta a prohibir en lugar de innovar. Pues España tiene los recursos necesarios para ser autosustentable en cuanto al campo energético. Pero el gobierno central no ha tenido la voluntad política de permitirlo.
Al contrario, se ha sometido a la agenda de la Unión Europea. En vez de abaratar el costo de vida de los españoles y mejorar su calidad de vida en cuanto a la supervivencia del calor, pretende restringirlos.
Cada minuto una nueva prohibición.
Lo que debe hacer el gobierno es cambiar la política energética dependiente y suicida que nos empobrece y obliga a los españoles a pagar la energía a precio de oro. https://t.co/oDlEotblrr— Santiago Abascal 🇪🇸 (@Santi_ABASCAL) August 2, 2022
Agenda España como alternativa a la Agenda 2030
«Disponer la elaboración de un plan nacional de soberanía energética, libre de imposiciones climáticas por parte de los organismos supranacionales, para ser aplicado por los poderes públicos competentes con la mayor urgencia posible”, es la premisa de la que parten las propuestas del Grupo Político de Vox en materia energética.
En lugar de darle más poder al Estado para suprimir la libertad de los ciudadanos, Vox propone quitarles menos dinero a los civiles y así abaratar costos. Aboga por la supresión de los impuestos ecológicos autonómicos y ecotasas que gravan las nucleares. A su vez, esto incluye recuperar la energía nuclear. Existen las instalaciones necesarias para lograrlo pero, deben ser rehabilitadas.
“Debemos crear un marco regulatorio de un mercado de hidrógeno concreto, claro y predecible que sirva para aprovechar todo nuestro potencial ya que nuestra nación tiene claras ventajas competitivas en el mercado internacional”, detalla el plan energético de Vox.
Por ende, proponen una Agenda España en contraposición a la sumisión a la Agenda 2030 impuesta desde Davos.