Una caravana de kilómetros ingresó la tarde/noche del domingo 18 de abril a la ciudad de Quito hasta la icónica tribuna de los Shyris. Históricamente allí se han convocado celebraciones y manifestaciones, esta vez con el fin de exigir la remoción del alcalde Jorge Yunda.
Frente a la tribuna yacía la sede de Alianza País, partido que llevó al expresidente Rafael Correa al poder. Pero fue demolida en la víspera de la derrota electoral de la izquierda, con el triunfo de Guillermo Lasso.
Justamente allí fue el festejo del fin del socialismo del siglo XXI en el Ecuador, el 11 de abril, mediante una caravana de automóviles, con el fin de respetar la distanciamiento social por la pandemia del coronavirus.
Esa algarabía impulsó la marcha del domingo que se dio de igual manera, aunque en menor medida que la semana anterior, incontables automóviles llegaron a exigir la salida del alcalde, a causa del juicio en su contra por peculado.
#aQuitoNoRobasMas #FueraYundaFuera
Y U N D A
L Á R G A T E
???????? pic.twitter.com/gzE8aq9z8U— (Q) The Ultimate Warrior ⚡️Rorka ???????? (@rorkafracul) April 19, 2021
El delito remite a la malversación de fondos públicos, en este caso respecto a la adquisición de 100.000 pruebas para detectar el coronavirus.
Dado que en Quito no hay camas en las salas de cuidados intensivos de los hospitales públicos, ni tampoco privados, aumenta el enojo de los quiteños, puesto que el alcalde no ha sabido afrontar la crisis. Además, ahora se suma la denuncia de haber usado mal el dinero para ese fin.
A esta molestia se adhiere el hecho que el alcalde Yunda amenazó con encerrar a los quiteños debido a la pandemia, ante una población que exige que él sea el encerrado; pero tras las rejas.
Delicada situación también es la de las personas las cuales obligas a viajar en transporte público. También para esto deberían tomar medidas, acaso la gente no se puede contagiar por viajar al 200% de capacidad en unidades obsoletas.#FueraYundaFuera pic.twitter.com/2lcvpibqWe
— Roy Kurze (@Roykurze) April 18, 2021
Y no se limita a él. Sebastián Yunda, el hijo del alcalde, también está bajo investigación por delincuencia organizada, puesto que en las pericias se halló un celular de su propiedad que de acuerdo con el fiscal provincial de Pichincha, Alberto Santillán, “contienen hechos que ameritan ser investigados, pues los mismos conllevarían conductas penalmente relevantes que pondrían en riesgo o lesionarían bienes jurídicos protegidos”, explica El Universo.
Catorce personas están involucradas en la adquisición de 100.000 pruebas para detectar el coronavirus por parte del municipio de Quito. Por lo tanto, Santillán presentó tres informes periciales a la fiscal general, Diana Salazar, como máxima autoridad institucional, con información detallada sobre lo encontrado en el dispositivo móvil.
Cabe mencionar que Yunda es la representación en Quito de lo que fue la escisión del socialismo del siglo XXI.
Al igual que Rafael Correa, llegó al poder con el partido Alianza País. Pero tras la rencilla de su fundador con el presidente saliente Lenín Moreno creó un partido nuevo: Centro Democrático, al cual se afilió posteriormente Jorge Yunda.
Durante el gobierno de Rafael Correa inició la carrera política de Yunda como presidente del Consejo Nacional de Radio y Televisión (Conatel).
Bajo un régimen que se valió de la propaganda estatal, Conatel cumplía un rol vital como la máxima autoridad de Telecomunicaciones, en vista que estaba encargada de la concesión de frecuencias a medios de comunicación y de regular la comunicación en el país.
En el 2013, Yunda se postuló como legislador bajo la bandera de Alianza País pero no ganó.
Finalmente, en el 2018 ganó las elecciones legislativas con dicho partido. Sin embargo, se desafilió de Alianza País casi enseguida y se incorporó al Centro Democrático (CD), el partido con el cual Andrés Arauz se lanzó como candidato a la presidencia frente al vencedor Lasso.
Yunda se desempeñó como legislador hasta que se postuló como alcalde de Quito en el mismo año, esta vez por el partido Unión Ecuatoriana (UE).
En caso de ser destituido de su cargo sería una derrota más para el socialismo del siglo XXI en el país y la región, pues perdería el control de la capital del Ecuador, apenas días después de ser derrotados en las urnas a nivel nacional.