Existe una crisis real en Venezuela, pero los medios masivos gastan más recursos en advertir lo que podría suceder en los gobiernos que critican que en lo que ya está sucediendo en los regímenes afines a su ideología.
Acusan de racismo y misoginia a Donald Trump, los mismos que hicieron un silencio rotundo sobre la masacre contra los indígenas pemones en frontera de Venezuela y Brasil, cuya primera víctima fatal fue una mujer indígena y horas después su marido.
Es decir, mientras rasgan sus vestiduras por la situación de las familias divididas en la frontera de EEUU y México, se olvidaron por completo de las familias asesinadas por las turbas compuestas por presos liberados leales a Maduro -al igual que el ejército- en la frontera de Venezuela, tanto con Brasil como con Colombia.
"Que el mundo sepa la verdad de la masacre de nuestros Pemones.
Ricardo delgado capitán de kumaracapay explica que el general Montoya estaba por cuenta propia apoyando a los pemones y tratando de evitar la matanza que hubo allá. La orden ese día era MATAR!" @soldadoDfranela pic.twitter.com/CRSWlOFE9M— Cristian Crespo F. (@cristiancrespoj) March 13, 2019
Dirigentes de la comunidad advierten que no solo se trata de una masacre, sino de un operativo para vaciar la zona. Ya son 1.000 los indígenas desplazados hacia Brasil.
Pero esto no se menciona entre quienes, desde la política, alegan defender a los desprotegidos.
Por ejemplo, el excandidato presidencial de Colombia, Gustavo Petro, exalcalde de Bogotá, llegó incluso a comparar a Jair Bolsonaro con Hitler y acusar a Trump de fascismo. Sin embargo, busca culpar a su rival político de la situación en Venezuela antes que al hombre que está a cargo: Maduro.
Dije en ese dia dramático que la deficiencia de Duque era mayúscula cuando su operación se destruía con unos camiones quemados por sus propios amigos
La prensa al unísono salió a decir que yo defendía a Maduro, solo defendía la verdad https://t.co/i6lrWBCYZ6
— Gustavo Petro (@petrogustavo) March 10, 2019
Cuando intentaron cruzar camiones de ayuda humanitaria desde Colombia hasta Venezuela y fueron quemados sobre el puente, Petro acusó a Iván Duque y sus “amigos”.
A través de redes sociales hizo eco de quejas que alegan que CNN fabricó la noticia para favorecer al gobierno de EEUU.
Pasa por alto la guerra declarada que existe entre CNN y la Administración de Trump, pese a que este ha denunciado abiertamente a dicho canal, así como el canal ha hecho abiertamente campaña en su contra.
Tanto así que cuando Trump anunció que retiraría las tropas de Siria fue criticado por ello, ya que una paz procurada por su enemigo es peor que la guerra.
De hecho, Trump ha denunciado varias veces de manera pública a CNN. Lejos de ser su cómplice, viven en confrontación constante.
En cuanto a la concepción social de las corrientes políticas, una simple búsqueda en Google muestra cómo el uso de los términos no solo se maneja a nivel mediático, sino cómo culturalmente hay una predisposición de caricaturizar a una corriente ideológica más que a la otra.
Los medios ocupan un rol fundamental en los términos que se vuelven comunes y consigo la apreciación que se tiene por ciertas ideas y corrientes ideológicas.
Por ejemplo, al ingresar el nombre de cualquier agencia de noticias, se puede evidenciar cómo la frecuencia con la que se refieren a los políticos de izquierda bajo el denominativo “ultra”, sucede 63,5 veces menos frecuencia que con su contraparte de derecha.
Mientras “ultraizquierdista” tiene 158.000 menciones, mientras que “ultraderechista” supera los 3 millones. Es 19 veces más probable. O sea, menos del 5% de las menciones polarizantes corresponden a cómo se ve a la izquierda política.
Los términos cobran relevancia porque modifican la versión de los hechos. Por ejemplo, cuando hubo manifestaciones masivas a favor de Nicolás Maduro, el izquierdista Petro se refirió a los participantes como “la ciudadanía”. Mientras que cuando hubo manifestaciones en contra de Maduro, se limitó a llamarlos “la oposición”.
Esta técnica es común entre los marxistas que dividen a la sociedad entre oprimidos y opresores. En la variante populista, lo hacen entre el pueblo y anti-pueblo. De modo que si colaboran con el político aliado de su ideología, las personas representan a la ciudadanía, sino son el enemigo; en este caso “la oposición”.
Bajo una república, en principio, todos forman parte de la ciudadanía. La ideología no da ni quita esa cualidad. Pero Petro demuestra que para él no es así.
Por su parte, el parlamentario José Manuel Olivares, que además de legislador es médico para pacientes con cáncer, emitió la cifra actualizada de muertos. Ascienden a 26 los muertos a causa de las fallas eléctricas y la falta de agua.
Aclara que desde noviembre hasta febrero la intermitencia del suministro eléctrico mató a 79 pacientes.
IMPORTANTE. Reporte de Hospitales de hoy. Lamentamos informar que debido a las fallas de luz, fallecieron dos personas. 1 en Magallanes de Catia (66 años) y 1 en Hospital Militar de Caracas (64 años). Hasta hoy, han perdido la vida 26 personas como consecuencia del apagón. pic.twitter.com/vCxOsVLQaP
— Jose Manuel Olivares (@joseolivaresm) March 13, 2019
Pero cuando los muertos pierden la vida bajo un régimen que defienden los difusores, no importa quienes ni cuánto son.
Más preocupa la amenaza de lo que podrían hacer quienes critican que lo que ya hizo y continúa haciendo quienes defienden.