Este sábado 2 de diciembre el Senado de los Estados Unidos aprobó una reforma fiscal que no solo supone una gran reducción de impuestos, sino también un incremento del déficit presupuestario.
La reforma, impulsada por el presidente Donald Trump, fue aprobada por la Cámara Alta con 51 votos a favor y 49 en contra, abriendo paso a la mayor reducción de impuestos en los últimos 30 años en el país.
“Estamos un paso más cerca de unos ENORMES recortes de impuestos para las familias trabajadoras de América”, escribió Trump a través de Twitter, celebrando la decisión del Senado.
We are one step closer to delivering MASSIVE tax cuts for working families across America. Special thanks to @SenateMajLdr Mitch McConnell and Chairman @SenOrrinHatch for shepherding our bill through the Senate. Look forward to signing a final bill before Christmas! pic.twitter.com/gmWTny3SfS
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) December 2, 2017
La reforma plantea reducir los impuestos coorporativos del 35 % al 20 % para el año 2019; sin embargo, la Cámara Baja tiene su propia versión del texto, que pretende que la reducción sea inmediata.
Ahora, los líderes republicanos del Senado deberán empezar las negociaciones para hacer que los textos sean conciliados y lograr con esto que la reforma pase a ser firmada por Trump.
Este primer triunfo legislativo para la administración del mandatario estadounidense podría alentar la inversión de las empresas y, por ende, el crecimiento económico del país.
Sin embargo, la ley también supondrá el incremento de USD $1 billón al déficit presupuestario de Estados Unidos, lo que preocupa a los demócratas del Senado, aunque Trump ha asegurado que esto será necesario para acelerar el crecimiento anual del país por encima del 3 %.
“Ahora tenemos una oportunidad de hacer América más competitiva, de evitar que los empleos se marchen fuera y dar un alivio sustancial para la clase media”, afirmó el líder republicano en el Senado, Mitch McConnell.
Otro aspecto de suma importancia de la reforma es la manera en que podría afectar a las clases medias y bajas del país. De acuerdo con Univisión, la medida “reducirá la carga impositiva para todas las escalas salariales solo en el corto plazo”, ya que después del 2021 a las familias que ganen USD $75.000 o más se les aumentará la carga.
El Comité Conjunto de Impuestos (JCT, por sus siglas en inglés) del Congreso de los Estados Unidos afirma que a penas el 44 % de los estadounidenses tendrán una baja de impuestos de más de USD $500 anuales.
“Los republicanos han conseguido tomar una ley mala y hacerla peor”, opinó el líder demócrata del Senado Chuck Schumer. “Esta ley va en directo beneficio de aquellos que ya son millonarios, de aquellos que ya son poderosos”, aseguró. Mientras tanto, el presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, aseveró que con las nuevas medidas las familias se ahorrarán anualmente USD $1.182.
Por otra parte, con la propuesta legislativa también se elimina un aspecto clave de la reforma sanitaria de Barack Obama, que establece penalizaciones para aquellos ciudadanos que no adquieran un seguro médico.